Un barco español salva y lleva a Canarias a 90 inmigrantes tras rechazarlos Marruecos
El Mundo, 24-07-2006El Rey Juan Carlos visita hoy a Mohamed VI Cayucos rescatados en alta mar. No importa su procedencia. Canarias salva a los sin papeles perdidos en aguas internacionales por orden del Gobierno, bajo el pabellón de la ayuda humanitaria. Es el caso del Esperanza del Mar – con base en Las Palmas y desplegado en la costa mauritana para atender a los pescadores españoles enfermos – , que últimamente abandona su misión original para buscar barcazas cargadas de inmigrantes. Como pasó ayer.
Hoy, el buque – hospital llegará al puerto de La Luz y de Las Palmas con 90 sin papeles – 88 hombres y dos mujeres de origen subsahariano – , después de que el barco Roland Delmas – dedicado al transporte de vehículos – diera la voz de alerta el pasado sábado tras encontrarse con el cayuco en medio de su travesía hacia Africa.
Un total de ocho horas tardó ayer el Esperanza del Mar en llegar hasta la embarcación, vigilada de lejos por el carguero.
Todos los inmigrantes presentan buen estado de salud y serán internados en los centros de extranjeros de las islas durante un periodo de 40 días, hasta su expulsión o puesta en libertad en la Península, que será, sin duda, el destino más común de todos ellos ante la imposibilidad de ser identificados.
Las mafias que se dedican a transportar gente desde el Tercer Mundo hacia los países desarrollados están de enhorabuena, y el fenómeno de la inmigración irregular aumenta ante la falta de medidas contundentes contra estas organizaciones, cuyo sustento es la desesperación y hambruna existente en el continente africano.
El Gobierno de Marruecos miró ayer para otro lado, cuando las autoridades españolas le propusieron la admisión de estos inmigrantes sin documentación, ya que todos fueron rescatados a 80 millas náuticas al sur de Dakhla (la antigua Villa Cisneros), el punto de tierra más cercano.
Fuentes de Salvamento Marítimo contaron que el barco español tomó rumbo a las Islas Canarias después de que Marruecos se negara a aceptar al grupo de inmigrantes, pese a que la costa más cercana era territorio alauí.
Horas después de que se supiera que Marruecos no quiso aceptar el desembarco de los 90 inmigrantes, fuentes diplomáticas españolas intentaron matizar esa negativa.
Dijeron que España ni siquiera realizó gestiones con Marruecos ni con Mauritania para que aceptaran a los sin papeles porque constató que ese casi centenar de personas sin documentar es de procedencia subsahariana.
El Ministerio de Asuntos Exteriores señaló a Europa Press que las embajadas españolas en Rabat y Nuakchott fueron advertidas de la posible apertura de cauces diplomáticos para una eventual devolución de los inmigrantes a Marruecos o a Mauritania.
«Muy difícil»
Sin embargo, según el Ministerio de Asuntos Exteriores, los responsables del Esperanza del Mar comprobaron que era «muy difícil» identificar la nacionalidad de esas personas, que por su aspecto físico parecen ser de origen subsahariano.
Esta circunstancia hizo que el buque se dirigiera a territorio español para desembarcar a los inmigrantes, siempre según la versión oficial de Exteriores.
Este hecho se produce un día antes de que el monarca español, Juan Carlos I, llegue a Marruecos, donde mantendrá hoy en Rabat un almuerzo privado con el rey Mohamed VI.
Será ésta la primera de próximas visitas españolas de alto nivel a Marruecos, entre las que destacan la de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, a comienzos de agosto para entrevistarse con el primer ministro alauí, y la del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, que tiene previsto reunirse con Mohamed VI el 4 de septiembre en Rabat.
En cuanto a Mauritania, el Gobierno español también recibió ayer una negativa rotunda para acoger a los inmigrantes del Esperanza del Mar.
A pesar de los convenios sobre inmigración firmados por esta nación africana con España, Mauritania tampoco admitió ayer el desembarco de los 90 sin papeles, ya que los inmigrantes no son originarios de su país.
Gran Canaria, a 320 millas de distancia, ha sido el lugar elegido para que atraque el Esperanza del Mar, ya que los inmigrantes fueron rescatados en aguas internacionales pero en lo que se conoce como «zona de búsqueda y rescate español», según comunicaron a EL MUNDO fuentes de Salvamento Marítimo.
Desde el pasado viernes, las costas de Canarias han recibido a cerca de 250 inmigrantes irregulares a bordo de cuatro cayucos. Uno de los tripulantes de una de esas embarcaciones llegó sin vida. Otro murió el pasado sábado por hipotermia y deshidratación como consecuencia de la dura travesía. Y ayer falleció un tercero, por las mismas causas. Todavía hay un inmigrante hospitalizado en La Candelaria, en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI), en estado grave.
El buque – hospital, que dispone de quirófano, equipo de Rayos X y unidad de quemados, rescató el pasado día 7 de julio a otros 112 inmigrantes irregulares, de origen subsahariano, que se encontraban a 300 millas náuticas al sur de Gran Canaria. En esta ocasión, los indocumentados fueron avistados por un barco de bandera griega que dio la señal de alarma a los servicios de emergencia.
Además, el pasado 16 de marzo, este barco hospital trasladó hasta la capital grancanaria los cadáveres de 25 inmigrantes que perdieron la vida cerca de las aguas de Mauritania.
A estos 250 inmigrantes llegados a las islas se unen los 90 que aún navegan a bordo del Esperanza del Mar, lo que supone un total de 340 personas indocumentadas procedentes de Africa desembarcadas desde el viernes pasado hasta la mañana de hoy.
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