Inmigración, la piedra clave y otras noticias del día
La Voz de Galicia, , 14-10-2022El INE sigue dando previsiones. En este caso se ha atrevido a vaticinar cómo estará España y Galicia cuando la humanidad llegue al 2030. Para empezar, los datos estadísticos indican que, si seguimos en estas tesituras, sin la llegada de nuevos habitantes la comunidad gallega perdería 20.000 habitantes por año. Contrasta la caída de población en la comunidad con el incremento en el conjunto de España, que según el instituto pasaría de los 50 millones dentro de 15 años. La clave para revertir esta tendencia a la baja en Galicia será la llegada de inmigrantes . Gracias a ellos, el saldo vegetativo será positivo.
Un 50 % menos en la factura del gas a las familias con caldera comunitaria. Los hogares que comparten caldera comunitaria tendrán una nueva ayuda para combatir los altos precios del gas. El Gobierno destinará 3.000 millones de euros a reducir sus recibos creando una nueva categoría de tarifa de último recurso (TUR ahorro vecinal) que beneficiará a 1,7 millones de familias con calefacción central.
Cuatro segundos antes. En el juicio del accidente de Angrois, ayer le tocó el turno al exdirector de Seguridad del ADIF, Andrés Cortabitarte. Culpó de todo lo sucedido al conductor del tren. «La causa del accidente es el incumplimiento del maquinista de la velocidad a la que tenía que circular», aseguró, afirmando después que la curva no era peculiar: «Hay unas 1.800 como esa en toda la red». Su estrategia consiste en poner el foco en el conductor del convoy: «Si hubiera frenado cuatro segundos antes no habría habido accidente, no estaríamos aquí».
Pañuelos gallegos para luchar contra Putin. La fábrica de Bopapel en Ponteareas lleva desde 1995 trabajando la pasta para hacer servilletas, papel higiénico y pañuelos. Estos últimos han caído en manos de los combatientes ucranianos en el frente gracias a que algún distribuidor de los productos de la empresa ha conseguido ganar el concurso público de las fuerzas armadas ucranianas. Los paquetes de clínex de Ponteareas forman parte ya de los suministros que Ucrania entrega diariamente a sus soldados.
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