Bruselas, 5 sep (EFE). – La Comisión Europea (UE) ha empezado a detectar señales de hartazgo en dos países miembros (Países Bajos y Bélgica) hacia la acogida de refugiados ucranianos, aunque cree que es solo algo “temporal”.

Así lo indicó hoy la responsable de la Comisión Europea a cargo del grupo de gestión migratoria, Beate Gminder, ante la Comisión de Libertades Civiles de la Eurocámara, que abordó la aplicación de la directiva que facilita protección temporal a los nacionales ucranianos que llegan a territorio europeo desde el comienzo de la guerra.

Preguntada por el supuesto rechazo en algunos lander alemanes a los refugiados, la responsable comunitaria admitió que se han percibido señales de fatiga en dos Estados miembros: Países Bajos y Bélgica.

“Creo que es un tema temporal, que no es permanente. Hasta ahora solamente hemos recibido señales de Bélgica y Países Bajos. La afluencia es tal que hace que todos estén desbordados, pero hasta ahora no sabemos de nadie más”, señaló.

El Parlamento Europeo evalúa periódicamente la gestión del tránsito de los refugiados ucranianos en la UE.

La responsable comunitaria señaló que desde que comenzó la guerra, el pasado 24 de febrero, se han producido 9,9 millones de entradas de personas desde Ucrania y Moldavia, de las que 8,6 millones eran nacionales ucranianos.

A la vez, muchos de los que llegaron han regresado a su país y desde mayo “hemos visto más salidas que entradas y esta tendencia aumentó en agosto”.

De los que permanecen en la UE, hay 4,1 millones de personas que se han registrado para disfrutar de protección temporal en la y 25.000 personas han solicitado el asilo.

Sobre los menores, las últimas cifras de la CE indican que hay más de medio millón de niños ucranianos que se han integrado en veinte Estados miembros y sistemas escolares nacionales.