Madrid – El Gobierno español puso fin ayer a la «odisea surrealista» – en
palabras de su embajadora en Malta, Marta Vilardel – que han vivido la
tripulación del pesquero español «Francisco y Catalina» y los 51
inmigrantes a los que recogió en el Mediterráneo hace una semana. Y lo
hizo poniendo en marcha el acuerdo a cinco bandas que ya había pactado
tres días atrás. Los dos aviones fletados por Defensa aterrizaron en la
madrileña base de Torrejón de Ardoz poco después de la medianoche.
   Las autoridades españolas acogerán, de forma provisional, a 29 de los
51inmigrantes mientras que Malta se ha hecho cargo de cinco, el Alto
Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) se ocupará de
otros diez. De los restantes, 12 viajan a Italia y cinco más a Andorra,
según informaron fuentes de Presidencia del Gobierno. Dos aviones
españoles recogieron ayer en Malta a 46 de los 51inmigrantes que durante
una semana han permanecido a bordo del pesquero español, después de que
las autoridades de este país aceptaran hacerse cargo de cinco de ellos,
cuatro de origen marroquí y un paquistaní.
   En uno de los
aviones viajaban 25 inmigrantes, la mayoría de ellos eritreos. Italia ha
aceptado hacerse cargo de 12 de ellos, mientras que los 13 restantes
volaban a primera hora de la noche camino de Madrid.
   El otro aparato
fletados por el Gobierno español trasladó a otros 21 inmigrantes. Este
avión hizo escala Barcelona para que cinco de ellos, todos ellos eritreos
fuesen recogidos en el aeropuerto y posteriormente trasladados hasta
Andorra. Los 16 restantes, 14 de ellos eritreos y dos etíopes, llegarán
esta noche a Madrid. Una vez en la capital, Acnur se hará cargo de los 10
inmigrantes que, en principio, iba a acoger Libia, mientras que los seis
restantes serán acogidos de manera provisional por las autoridades
españolas.
   Fuentes gubernamentales españolas criticaron ayer la
actitud de las autoridades de La Valetta y dejaron claro que Malta es «la
culpable» de la situación que se ha vivido en su objetivo de dar un
«escarmiento» a aquellos subsaharianos que intentan llegar a sus costas
   «Darle un abrazo». «Afortunadamente se ha acabado esta odisea absolutamente
surrealista que creo que hemos estado viviendo todos nosotros, sobre todo,
la tripulación del barco», señaló. Lo primero que hizo en el momento en el
que el barco atracó en el muelle fue pedir al capitán que bajase del
«Francisco y Catalina» para «darle un abrazo», añadió. Durá y el resto de
la tripulación indicaron a Vilardel y a las autoridades maltesas que
quieren «repostar, tomar suministros, es decir más agua y más comida ahora
que tienen un poco más de sitio, y seguir faenando», apuntó la embajadora.
   Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa
Fernández de la Vega, fue la encargada de anunciar el reparto de los
inmigrantes del «Francisco y Catalina» y evitó contestar a la pregunta de
si España e Italia han estado negociando al margen de ello la
transferencia de un contingente de inmigrantes marroquíes que se
encuentran en la isla italiana de Lampedusa. En cualquier caso, subrayó
que los marroquíes del pesquero serán devueltos al Reino alauí. «Tenemos
un convenio con Marruecos que está funcionando bien y, por tanto,les
daremos el mismo tratamiento que a los inmigrantes marroquíes que vienen
de forma irregular a nuestro país», aclaró.
   Asimismo,
se refirió al problema surgido con Libia. «Se consideró finalmente, por
recomendación de la propia organización, que Libia es un país que no ha
suscrito la convención internacional (de atención a refugiados) y que
sería más razonable que Acnur se hiciera cargo de ellos», explicó, informa
Ep.
   En último término, anunció que el Consejo de Ministros ha
decidido conceder la Medalla del Mérito Civil al armador y a la
tripulación del pesquero en señal de «agradecimiento del Gobierno y los
españoles por el auxilio prestado en alta mar» al grupo de 51 inmigrantes
que estaba a la deriva la pasada semana. «Estos pescadores han salvado 51
vidas humanas, aún habiendo tenido que dejar por unos días sus
obligaciones profesionales. Merecen nuestro agradecimiento por su
humanidad, por su generosidad y por su valentía». Además, De la Vega
señaló que el Ministerio de Agricultura acordó por su parte «buscar la
asignación de ayudas» al pesquero para «compensar las pérdidas económicas.