La Guardia Civil interceptó ayer un cayuco al sur de Tenerife con 43 inmigrantes de origen subsahariano a bordo, uno de ellos ya fallecido y otros cuatro ocupantes en estado grave. Los heridos, que en un principio se pensó que podrían haber muerto en el trayecto, fueron atendidos por los sanitarios en el muelle del municipio de Los Cristianos y trasladados al hospital de La Candelaria. Durante las tareas de auxilio se vivieron auténticos momentos de agonía, debido al delicado estado en el que llegaron los tripulantes de la barca.

No fue la única embarcación ocupada por inmigrantes indocumentados que trataba ayer de alcanzar la costa española. La Marina Real marroquí localizó otro cayuco en aguas del Sahara Occidental con 86 inmigrantes que se dirigían hacia las Islas Canarias. Otra barcaza fue avistada durante la tarde a 60 millas a sur de Tenerife con medio centenar de ilegales.

El litoral de Málaga fue otro punto de llegada. Durante los últimos dos días se han interceptado dos barcos con 58 inmigrantes, diez de ellos menores de edad.