El pesquero con inmigrantes recibe una contraorden de Malta y regresa de nuevo 12 millas de la costa

Deia, 21-07-2006

El pesquero español “Francisco y Catalina” que mantiene a 48 inmigrantes a bordo se ha visto obligado a regresar a 12 millas de la costa maltesa tras haber recibido inicialmente la autorización para arribar al puerto de La Valeta.El segundo patrón de la embarcación, Bautista Molina, informó a Efe de esta “contraorden”, que se produjo, dijo, quince minutos después de que iniciaran el trayecto para alcanzar el puerto de La Valeta. El patrón del pesquero subrayó “el desánimo” que ha cundido entre la tripulación y los inmigrantes a bordo tras conocer que debían regresar a la posición inicial, a 12 millas de la costa maltesa.

Esta contraorden la recibió la tripulación después de que, pasadas las 18:30 horas, tuviera la autorización para llegar al puerto de la capital maltesa y así poner fin a una situación de incertidumbre que ya se alarga siete días.

Entre tanto, dos aviones fletados por el Ministerio de Defensa han partido de las bases aéreas de Torrejón de Ardoz y de Getafe con destino a Malta para recoger a los 48 inmigrantes. Así lo confirmaron fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores, quienes apuntaron además que, previsiblemente, a su regreso ambos aviones aterrizarán en Torrejón.

Es probable que uno o los dos aviones hagan escala en aquellos países con los que ya está determinada la acogida de inmigrantes. No obstante, las mismas fuentes de Exteriores no pudieron precisar ni el día ni la hora en que se producirá el regreso de los dos aviones.

En cualquier caso, el acuerdo cerrado ayer por el Gobierno español con varios países europeos y africanos, y con la intermediación de la Comisión Europea, prevé que España acoja a 12 inmigrantes, se repatríen cinco a Marruecos algo a lo que ya se ha comprometido el Ejecutivo marroquí y uno a Pakistán.

Del resto, diez acudirán a Italia, otros tantos a Libia, cinco a Andorra y ocho a Malta. Según explicó hoy un portavoz de la Comisión Europea, este organismo aceptó financiar el coste de los vuelos necesarios para trasladar a los inmigrantes a todos los países que se comprometieran a darles acogida.

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