eto, a los responsables de Cáritas les preocupan las personas que están en situación irregular y que al carecer de papeles no tienen acceso a prestaciones, empleo o formación para optar a un puesto de trabajo. «Son la cara más cruda de la pobreza», resaltan en el centro de Ferrol, donde destacan que han atendido a familias de Colombia Marruecos y Venezuela. Así como a desplazados de Ucrania, en especial en Cariño y As Pontes.

Los programas para personas sin hogar ayudan a 404 personas, la mayoría hombres solos.

64 %

Mujeres con niños

La mayor parte de personas que piden ayuda son madres con hijos y que trabajan.

35 %

Inmigrantes

Buena parte de las asistencias son a familias con menores.