Mientras algunos de los desplazados ucranianos llegados en las últimas semanas a Gipuzkoa han decidido ya regresar a su país o al menos lo tiene en mente, otro buen número ha optado por intentar echar raíces en el territorio. Al menos eso se desprende del aumento significativo de personas procedentes de Ucrania que se han empadronado en Euskadi y especialmente en Gipuzkoa en marzo, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que ha puesto en marcha una nueva sección dedicada a seguir la evolución de la población ucraniana en el Estado.

Si a comienzos de año había 2.530 ucranianos censados en el País Vasco (1.489 en Gipuzkoa, 537 en Bizkaia y 504 en Araba), el 31 de marzo la cifra había aumentado a 3.251. De esos 721 nuevos empadronamientos, Gipuzkoa se lleva la mayor parte, con 322 nuevos vecinos. Por meses, en enero se registraron 3, en febrero 7, y en marzo, con la guerra ya iniciada (la invasión comenzó el 24 de febrero), 312. En ese mes, en Bizkaia se censaron 266 ucranianos y en Álava, 143. Cifras que suponen un salto enorme en comparación con febrero, cuando junto a los 7 ucranianos que se empadronaron en Gipuzkoa, 6 lo hicieron en Bizkaia y 2 en Álava.

Según la base de datos del INE, un total de 21.217 ciudadanos de Ucrania se dieron de alta en el padrón en marzo en España, casi 50 veces más que en febrero, cuando hubo 435 inscripciones, mayoritariamente mujeres. En total, hay 133.046 ucranianos empadronados en España en el primer trimestre de 2022, con un crecimiento de casi el 20% desde comienzos de año, debido principalmente al mes de marzo.

Por otro lado, el INE también recoge que, durante el mes de marzo, el número de ciudadanos de nacionalidad ucraniana con documentación de residencia en vigor ha aumentado en 28.667. En febrero, este número aumentó en 191 personas. En total, hay 124.486 ucranianos con permiso de residencia en vigor. Además, según los datos del INE, a finales de marzo estaban afiliados a la Seguridad Social 48.619 ucranianos, 1.089 más que a finales de febrero.

Cursos de formación
Precisamente pensando en ayudar a integrar a los refugiados que, al menos de momento, tienen intención de establecerse en Gipuzkoa, asociaciones profesionales del territorio de diversos sectores empezaron hace unas semanas a promover cursos formativos para que estas personas puedan insertarse laboralmente en el menor tiempo posible. La Asociación de Empresarios de Hostelería de Gipuzkoa fue la pionera al organizar el primer curso de formación en su sede de Donostia, en colaboración con la Asociación Lira y Fomento de San Sebastián.

Tras su buena acogida, esta semana ha comenzado un segundo curso, en este caso de atención en sala, en la que participan doce mujeres que quieren encontrar trabajo como camareras en el territorio. Y la próxima semana se ofrecerá un tercero de cocina. Además de la formación práctica y teórica que reciben, desde la Asociación Lira también ayudan a los desplazados a redactar sus currículos y les asesoran legalmente.