La guerra en Ucrania está provocando una oleada de refugiados a distintos países fronterizos y entre ellos miles de menores. Desde que comenzó la ofensiva rusa, se han registrado en España casi 14.000 menores, un 40% de los casi 35.000 desplazados que ya cuentan con sus papeles en regla en España.

Entre ellos, más de un centenar son menores llegados al país sin la compañía de adultos y en estos momentos la autoridades están en alerta por un movimiento ilegal que se está aprovechando de la solidaridad de muchas organizaciones para otros fines.

La solidaridad espontánea y sin control, aunque bien intencionada, además de no cumplir con los protocolos establecidos, puede favorecer actividades delictivas relacionadas con el tráfico de personas. Esta semana en Madrid, la Policía detuvo en la estación Sur de autobuses de Madrid a un hombre ucraniano que se hacía pasar por familiar de dos adolescentes de 15 y 16 años. Los agentes ya estaban sobre aviso, pero los interrogatorios y el contenido del equipaje de las menores, «ropa no acorde a las temperaturas de esta época del año» y muchos productos cosméticos, confirmaron las peores sospechas de la policía.

Ayer en El País se informaba de «El misterioso viaje de los niños de Ucrania perdidos entre Huelva y Canarias». CANARIAS7 se puso en contacto con Iratxe Serrano, directora general de Protección a la Infancia y la Familia del Gobierno de Canarias, y el mensaje es claro: «Existe un riesgo alto en estos momentos de que alguien se aproveche de la buena intención de mucha gente solidaria para acoger a menores de Ucrania para otros fines. En relación a la información sobre la llegada de un grupo de menores a Canarias desde Huelva debo decir que hace unos días recibí una llamada del delegado del Gobierno en Canarias de la posibilidad de que una guagua se trasladase desde Polonia al sur de la Península para traer a menores a Canarias. Lo que sabemos es que ese grupo no ha embarcado, pero se desconoce dónde se encuentran.

Hace unos días llegó otro grupo a Fuerteventura por medio de una ciudadana ucraniana. La alcaldesa de La Oliva manifestó que no sabía nada del asunto. Lo que se sabe es que están bien atendidos en el albergue de Lajares y escolarizados, pero ya están surgiendo algunos problemas. Hay que dejar claro que la llegada de Menores Extranjeros no Acompañados (Mena) debe coordinarse por medio del Ministerio, bajo una estricta y exhaustiva coordinación y supervisión», destaca.

Canarias lleva dos años suplicando el apoyo a otras comunidades. En la actualidad se están acogiendo a un total de 2.700 menores en las islas y solo las comunidades han sido receptivas con 208. «Lo que está pasando con los niños y niñas de Ucrania me preocupa. Sabemos que han llegado niños bajo ningún control y que la Policía ya ha trasladado a Fiscalía algunos casos. Para que una familia sea acogedora de estos menores se deben cumplir unas pautas muy claras y hay que tener cuidado con esta situación, porque si esto no se controla podrá producirse un caos».