Los niños refugiados en el metro de Járkiv reciben la visita de superhéroes

Spider-Man, Batman y una coneja rosa han jugado con ellos para animarles tras un mes de guerra

La Vanguardia, , 28-03-2022

La invasión de Ucrania ha provocado que millones de personas tengan que abandonar sus casas para poder sobrevivir. Muchos han podido huir a países vecinos como Polonia pero otros se han tenido que quedar en Ucrania. Un lugar seguro es el metro.

En las estaciones de metro de todo el país se amontona la gente con lo poco que tienen. Llevan muchos días refugiados de los misiles rusos. Ha pasado tanto tiempo que las fuerzas empiezan a flaquear. Por eso, un grupo de animadores ha decidido poner de su parte para que al menos los niños pasen un buen rato.

Lee también
Éxodo imparable de la elite profesional rusa
XAVIER MAS DE XAXÀS
People hold anti-war placards before a rap concert for Ukraine by Russian rapper Oxxxymiron, amid the Russian invasion of Ukraine, in Istanbul, Turkey March 15, 2022. REUTERS/Dilara Senkaya
De esta manera, los niños de una estación de Járkiv han podido disfrutar de Spider-Man, Batman y un conejo rosa. Los tres han estado jugando con los más pequeños, han bailado y han intercambiado juguetes.

Los niños se han animado gracias a esta visita
Los niños se han animado gracias a esta visita
“Podemos llevar alegría y sonrisas, ¡y con eso ayudamos! No vamos a dejar a nuestros hijos”, ha apuntado Spider-Man a Reuters. “Los niños sólo quieren jugar, así son ellos”, ha asegurado.

“En el momento actual es muy importante mantener la calma y divertirse. Y estamos tratando de hacer al menos un poco para ayudar a cambiar el estado de ánimo, distraernos de la rutina diaria. ¡Así que decidimos animar a todos de esa manera, inyectar algo de energía y diversión!”, ha explicado Batman.

Lee también
Una pareja española consigue escapar de Ucrania con su bebé, nacida por gestación subrogada
LA VANGUARDIA
Poder llegar a casa y acariciar a la pequeña Evelyn es el final de una auténtica prueba de amor y valentía. Marina y Antonio estaban en Kiev, con sus mochilas de supervivencia preparadas, para realizar los trámites y traerse a su bebé nacido por gestación subrogada. Pero entonces estallaron las primeras bombas. Tuvieron solo diez minutos para recoger a la niña y huir en un convoy de la Embajada española. Pese al estallido de la guerra arriesgaron sus vidas para alejarla de este horror. Cuentan que lloraron mucho y que siguen angustiados por la veintena de recién nacidos que todavía espera que sus padres los saquen de ese refugio. Cuando Evelyn crezca le contarán que ella también fue una valiente y que sus padres hicieron todo por amor.
Gracias a esta acción el ambiente en la estación de metro es “totalmente diferente”. Ahora los niños están “llenos de energía, muy activos y dispuestos a participar” en juegos pese a la complicada situación que hay en la superficie.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)