Un empresario de la construcción sadense, cuyas iniciales son J.?M.?L., fue detenido el pasado martes por funcionarios del grupo operativo de extranjeros de a Jefatura Superior de Policía de Galicia, acusado de dos delitos contra los derechos de los trabajadores y de los ciudadanos extranjeros.

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La investigación comenzó a primeros del mes de junio tras la denuncia de un ciudadano brasileño en situación irregular en España que trabajó para este empresario. En su comparecencia en comisaría, relató que fue contratado con la condición de residir en un piso propiedad del empresario, que compartía con otros empleados y por el que debían pagar la cantidad mensual de 240 euros.
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Una vez que el denunciante aceptó esta condición, pactó trabajar como electricista durante once meses por un sueldo de 1.000 euros. Lo que ocurrió, según la denuncia, es que su salario se redujo a 400 euros, una vez descontados los gastos originados por el alquiler del piso y otros, como el agua o la luz.

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Seguridad Social

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Además, el ciudadano brasileño declaró que durante ese tiempo trabajó sin ser dado de alta en la Seguridad Social y sin ningún seguro médico. También afirmó que en su misma situación se encontraban trabajando para el empresario otros extranjeros, concretamente brasileños y rumanos. La investigación concluyó con la detención no sólo del empresario. También fueron arrestados un trabajador brasileño de 25 años, J.?A.?D.?O., y otros dos rumanos de 20 y 44 años, M.?I.?R. e I.?R, respectivamente, por situación irregular.