El Gobierno regional ha dejado en suspenso su colaboración con el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales en la acogida de subsaharianos, y se niega de momento a recibir más vuelos desde Canarias. La Dirección General de Inmigración ya no ha acogido a ningún contingente esta semana, y el responsable de este departamento, Basilio Gómez, anunció ayer que la Comunidad no volverá a hacerse cargo de ningún traslado de momento. La decisión, pues, no se presenta como definitiva. «Veremos a ver qué pasa pero, de momento, nosotros no tenemos por qué cargar con la responsabilidad de una política insostenible por parte del Gobierno central», explicó el director general de Inmigración. Además, aseguró que «no tenemos más capacidad en los albergues» y denunció que «no hay control de los flujos migratorios».

Basilio Gómez denunció que «si seguimos así en un año el número de subsaharianos a los que atendemos habrá crecido un 100%», y advirtió de que «la situación puede estallar». La delegación del Gobierno desmintió, sin embargo, que se esté produciendo un incremento de tales proporciones. «La política de reducción de fronteras ha hecho disminuir las entradas de cayucos desde el sur», aseguró la responsable de Inmigración, Lola Jara. Con los datos en la mano, Murcia ha recibido a 354 subsaharianos llegados de Canarias desde el 1 de enero a junio de este año. Una cifra inferior a la del mismo periodo de 2005 (410) y 2004 (711), y similar a los flujos llegados a Valencia o Cataluña.

Sin embargo, Basilio Gómez asegura que «de regiones vecinas llegan muchos más», con lo que al final los servicios sociales y las ONG que colaboran con la Comunidad se encuentran con un número significativo de «personas a las que no podemos integrar porque ni siquiera pueden trabajar».

La delegación del Gobierno, consideró «injusta» la decisión del Gobierno regional de paralizar de momento el programa de acogida de subsaharianos aunque aseguró que «están en su derecho». Además, Lola Jara subrayó que «la situación sí era realmente insostenible con el gobierno del PP, cuando tenía a un millón de indocumentados; eso sí era una bomba que podía estallar y que afortunadamente fue desactivada». La responsable de Inmigración de la delegación aseguró que «el Gobierno central está dando pasos importantes para abordar el problema, como el Plan África, que incluye un incremento de la cooperación y ayuda a los países subsaharianos».

Varias ONG criticaron a principios de esta semana los problemas de integración de los subsaharianos por la «ineficacia» de los programas de acogida pactados entre los gobiernos central y autonómico. «No hay inserción social, sólo techo y comida durante 15 días en un albergue; y después van a la calle», denunció la plataforma Desobedecer la Ley – Convivir sin Racismo.