Daniel Conesa es uno de los hombres más influyentes de Melilla. Mano derecha del presidente de la Ciudad, ostenta los cargos de portavoz del Gobierno; consejero de Economía, Empleo y Turismo; y vicepresidente de Promesa. En una entrevista a COPE, en el programa ‘El anzuelo’, desvela sus pensamientos sobre la actualidad de la ciudad.

¿Qué opinión le merece el hecho de que Ceuta y Melilla no estuvieran invitadas a la reunión mantenida recientemente en Rabat para tratar el tema de la inmigración?

Se trata de una situación paradójica, porque Melilla y Ceuta son las únicas fronteras terrestres de la Unión Europea que lindan con África. Si hay un sitio donde se sufre de manera directa el gravísimo problema que existe con la inmigración ilegal es en ambas ciudades. Este el resultado de un problema que tiene España y se llama José Luis Rodríguez Zapatero. Es un presidente bocazas y, cuando se habla más de la cuenta, se corre el riesgo de meter la pata. Un día dijo que invitaría a las reuniones con los países fronterizos a las autonomías afectadas, pero nunca ha llegado la invitación para Ceuta y Melilla.

CpM denunció hace unos días que la Ciudad no ha recurrido hasta las últimas consecuencias una sentencia judicial que obliga a Promesa al abono a Prensa Melilla de más de 100.000 euros por unos cursos. ¿Por qué no luchan hasta el final?

Lo que no ha dicho CpM es que se han pedido hasta dos informes jurídicos distintos, de abogados distintos, para ver qué posibilidad de recurso tenía Promesa de esa sentencia de la Audiencia de Málaga en Melilla. Los informes coinciden en que la vía está agotada. La única posibilidad era un recurso de casación ante el Tribunal Supremo y no se daban las circunstancias que permitían ese recurso.

Las relaciones con la Delegación no son muy buenas, ¿no?

No, independientemente de que las relaciones personales puedan ser más o menos cordiales, que lo son. La Delegación del Gobierno es una correa de transmisión de la política destructiva del PSOE de Melilla. El verdadero delegado del Gobierno de Melilla es Dionisio Muñoz. Se ha convertido en la sombra del delegado del Gobierno y es quien marca las directrices a seguir en la Delegación, destruyendo todo lo que hace el Gobierno de la Ciudad.

¿Y qué nos dice del cierre de Galápagos?

Fue un capricho de la Delegación, aunque no sé si asesorado por Dionisio Muñoz, por no hacer sido el delegado invitado a la inauguración de una obra por parte de la Ciudad. Se trata de una argucia para darle en las narices al Gobierno local y no se dan cuenta de que han fastidiado al pueblo de Melilla por prohibirles el paso cuando antes cualquiera podía ir.

Si se produjera algún desprendimiento y dañara a alguna persona, ¿de quién sería la culpa?

Es una zona adscrita a la Dirección General de Costas, allá ellos.