Joserra Barbazán y Miguel Ángel Lemos Teixera partieron este miércoles a las cinco de la tarde rumbo a la frontera entre Polonia y Ucrania, a donde tienen previsto llegar en la noche del jueves. Viajan en una furgoneta, que lleva un remolque, ambos llenos de alimentos y productos donados por los errenteriarras. Durante el viaje no tienen previsto realizar ninguna parada, se turnarán al volante para llegar cuanto antes. Ya el sábado emprenderán el viaje de vuelta para llegar a Errenteria el domingo por la tarde. «El lunes tenemos que ir a trabajar», recuerda Joserra Barbazán.

La iniciativa de estos dos voluntarios errenteriarras es una de las muchas que están surgiendo tras la invasión de Ucrania y el éxodo de miles de refugiados que huyen de las bombas. «Vimos la noticia en el DV que en el bar Aker habían organizado una recogida de alimentos y productos para enviar a la frontera, y nos acercamos a ayudar», explica Joserra. Al principio ofreció su furgoneta para ir llevando al local de Trintxerpe de la Asociación cultural y de cooperación Ucrania Euskadi las donaciones que iban llegando al bar. Pero viendo el volumen de lo que se estaba recogiendo, Miguel Ángel Lemos y él decidieron que ellos también irían hasta la frontera de Ucrania a entregar parte de esos productos.

Miguel Ángel Lemos, ‘Mendeku’ (Bar Aker) y Joserra Barbazán
Miguel Ángel Lemos, ‘Mendeku’ (Bar Aker) y Joserra Barbazán

«Hemos calculado que el viaje costará unos 3.000 euros»
«Durante todos estos días ha sido increíble la ayuda de muchos particulares y empresas que se han volcado en la recogida, bien entregando alimentos y productos, bien con su apoyo económico», insiste Joserra. Porque en una primera estimación, sólo en gasolina prevén gastarse 1.400 euros, a lo que hay que sumarle los gastos de los peajes. «Hemos calculado que el viaje costará unos 3.000 euros», asegura.

Joserra Barbazán también agradece la ayuda que les ha prestado la empresa IDK elektronika. En sus instalaciones se han encargado de clasificar todos los productos recogidos y organizarlos en paquetes. «Al final llevamos 7 pales, y sin su colaboración nosotros no lo hubieramos podido hacer». Pañales para niños, productos de higiene, medicinas y comida enlatada. «Llevamos de todo menos ropa, porque nos han dicho que allí tienen mucha». También llevarán agua embotellada, que comprarán en algún supermercado de Polonia.

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