Galdakao es «agradable y de ambiente respetuoso», señalan los inmigrantes
La gran mayoría de los hombres trabajan en la construcción y las mujeres en el servicio doméstico
El Correo, , 14-02-2022Más de 7.500 personas procedentes de diversos países residen actualmente en la comarca de Nervión-Ibaizabal. Galdakao, una localidad con más de 29.000 habitantes, cuenta con 1.764 vecinos de nacionalidad extranjera. Estas personas llegaron en su día desde diferentes procedencias, pero, ¿cómo viven, están integradas, cuáles son sus deseos, su día a día y sus necesidades? «Son vecinos que viven con nosotros, pero hace falta que convivamos», apunta la concejala de Inmigración, Nerea Orozko. A partir de estas preguntas, el Observatorio Vasco de Inmigración, Ikuspegi y el Ayuntamiento, han elaborado un diagnóstico, pionero en la comarca, que pretende «avanzar en el conocimiento de la realidad de las personas de origen extranjero en Galdakao», comentó Lía González, profesora de la UPV/EHU y miembro de Ikuspegi.
El estudio refleja que en la localidad galdakaotarra la mitad de estas personas procede de en algún país latinoamericano (46,7%), seguido por la Unión Europea (24,4%), y Magreb (15,1%). «Tal y como sucede tanto a nivel autonómico como de Bizkaia, los flujos hacia Galdakao están feminizados, algo más de la mitad son mujeres », detalló la investigadora. Otra de las características distintivas de la estructura poblacional del municipio, es el importante número de hombres de origen extranjero en la franja de los 15 a los 19 años que residen en el municipio, un total de 152. Para entender estas cifras, «hay que tener en cuenta que aquí se sitúa el centro residencial para menores extranjeros no acompañados, Vivero», aclaró.
Por otro lado, quienes participaron en el diagnóstico, describieron Galdakao como «un lugar de residencia tranquilo y agradable, sin aglomeraciones, arquitectónicamente cuidado y limpio, dotado de infraestructuras básicas y, en particular, buenas vías de comunicación con Bilbao y otros municipios y áreas». Asimismo, sobre el ambiente en las calles y lugares de ocio, aseguraron que «se aprecia la ausencia de conflicto y un trato respetuoso y cordial». Entre los principales aspectos negativos que los vecinos inmigrantes le ven a la vida en Galdakao, está el hecho de que «es un municipio muy caro» en el que también han apreciado «falta de vida social y opciones de ocio para la infancia y la juventud». A esto se le suma que se ha convertido en un «pueblo dormitorio» con el paso de los años.
Una de las lacras con la que este tipo de estudios pretenden acabar es la de la discriminación y las actitudes racistas y xenófobas. Según detallaron los responsables, quienes sufren en mayor medida estas situaciones son «las mujeres que han llegado aquí solas y con escasos recursos económicos y, por otro, la comunidad musulmana y en especial los menores y jóvenes magrebíes sin referentes familiares».
Plan municipal
Otro de los aspectos esenciales sobre los que se ha recabado información para conocer cómo es la vida de estos vecinos, es el laboral. «Se observa que se han hecho más contratos», comentó González. En total 716 personas extranjeras encontraron empleo en la localidad el año pasado, la mayoría de ellos hombres y en el área de la construcción, y ellas en actividades del hogar o de jardinería. El lugar elegido por la mayoría de la población inmigrante para asentarse es el barrio de Elejalde, donde un 14,6% de los vecinos han nacido en algún país extranjero. Junto a esta zona, Bengoetxe (8,8%), Olabarrieta, Aperribai (8%) y Tximelarre (7,2%) son los barrios que cuentan con más vecinos extranjeros.
«Gracias a este análisis, nos hemos encontrado con diversas realidades que tenemos que abordar, y para ello, en marzo, empezaremos a diseñar un plan municipal en el que incluir todas las propuestas», señaló la edil de Inmigración. Entre las cuestiones que este nuevo programa pondrá sobre la mesa, se encuentra la relacionada con «los procesos de información y sensibilización de todas las personas que atienden a la ciudadanía, para garantizar un trato adecuado y que no haya ningún tipo de discriminación», detalló Orozko. Otra de las barreras está en la dificultad de acceso a la vivienda, «que se ha convertido en una de las mayores problemáticas para los colectivos de personas de origen extranjero residentes y merecen atención específica», subrayó.
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