Open de Australia

El ministro de Inmigración australiano cancela la visa a Djokovic

El Mundo, Lucas de la Cal, 14-01-2022

¿Es Djokovic un riesgo para la salud, la seguridad y el buen orden de la comunidad australiana? Esa era la pregunta, en base a la Ley de Migración australiana, que tenía que contestar el ministro de Inmigración Alex Hawke para decidir si retirara nuevamente la visa al tenista serbio. Ha tardado cuatro días en pronunciarse. Pero ya tenemos respuesta: la infección por Covid de Djokovic en diciembre no lo hace elegible para una exención de la vacuna que se salte de las reglas de entrada al país. Por lo tanto, su visa queda cancelada.

Hawke ha tomado la decisión de deportar al número 1 del tenis. La sección 133 de la Ley de Migración le otorgaba ese poder excepcional para ser juez, jurado y verdugo en el mediático caso del tenista.

“Hoy ejercí mi poder para cancelar la visa del Sr. Novak Djokovic por motivos de salud y buen orden, sobre la base de que era de interés público hacerlo. Esta decisión siguió las órdenes del Tribunal Federal de Circuito y Familia el 10 de enero de 2022, anulando una decisión de cancelación anterior por motivos de equidad procesal. Al tomar esta decisión, consideré cuidadosamente la información que me proporcionó el Departamento del Interior, la Fuerza Fronteriza de Australia y el señor Djokovic. El gobierno de Morrison está firmemente comprometido con la protección de las fronteras de Australia, particularmente en relación con la pandemia de COVID-19. Agradezco a los oficiales del Departamento del Interior y la Fuerza Fronteriza Australiana que trabajan todos los días para servir los intereses de Australia en entornos operativos cada vez más desafiantes”, ha anunciado Hawke en un comunicado emitido por el Gobierno australiano.

Pero el partido judicial de Djokovic contra el Gobierno australiano aún no ha terminado.

Su equipo legal puede apelar ante un tribunal federal la decisión del ministro y evitar la deportación inmediata del tenista, que se vería obligado a regresar de nuevo a un centro de detención de inmigrantes si no decide abandonar el país. El proceso judicial se puede prolongar hasta la próxima semana, incluso después de que haya empezado el Open de Australia.

A principios de enero, la estrella serbia tenía un plan claro. Los funcionarios del estado de Victoria y del organismo rector del tenis australiano le habían dado luz verde, a través de una exención médica, para entrar en Melbourne a pesar de no estar vacunado, como dicta la directriz fronteriza del país. Djokovic estaba listo para defender su título del Open y convertirse en el tenista con más Grand Slam de la historia.

En cambio, el plan se torció para el serbio cuando se chocó contra la pesadilla burocrática australiana y la dura política de inmigración. Primero, los funcionarios fronterizos le revocaron la visa y lo retuvieron en el aeropuerto durante ocho horas en régimen de incomunicación. Luego, fue detenido durante cinco días en un hotel reconvertido en una prisión para refugiados y solicitantes de asilo. Algunos de sus compañeros del centro llevaban hasta nueve años atrapados pasando por un bucle de detenciones.

El lunes, un juez federal anuló la cancelación de la visa y lo liberó inmediatamente de la detención. Djokovic había ganado el primer partido al Gobierno del primer ministro Scott Morrison. Los agentes fronterizos cometieron varios errores cuando detuvieron en el aeropuerto de Melbourne al tenista, negándole la equidad procesal en las horas posteriores. No le dieron el tiempo estimado por la legislación del país para contactar con sus abogados y recibir asesoramiento.

Eso lo usaron sus abogados en su argumentario. Y el juez les dio la razón. El tema de la exención médica, respaldada por un panel independiente convocado por las autoridades de Victoria, quedó en un segundo plano, aunque el Gobierno central siguió insistiendo en que la la infección previa de Covid en los últimos seis meses no es una exención válida para no estar vacunado.

Precisamente, el positivo de Djokovic un mes antes fue lo que generó la siguiente polémica. El serbio llegó a Australia con una exención médica a la vacuna que logró mostrando a las autoridades del tenis australianas que había dado positivo en una PCR el 16 de diciembre.

PÓLÉMICA CON LA PCR

El miércoles, en un mensaje en su cuenta en Instagram donde pretendía “abordar la continua información errónea sobre mis actividades”, Djokovic explicó que el día 16 se hizo una prueba rápida de antígenos, que arrojó un resultado negativo. También se hizo una prueba PCR ese mismo día, cuyo resultado, esta vez positivo, se lo dieron el 17 de diciembre. Pero en su declaración jurada ante la corte, Djokovic dijo que fue “examinado y diagnosticado” el 16 de diciembre.

Esta semana, el diario alemán Der Spiegel publicó que, siguiendo los datos de la URL del resultado de la PCR de Djokovic, esta se habría realizado en realidad el 26 de diciembre con un resultado negativo que luego pasó a ser positivo. Entonces empezaron las suposiciones sobre si el Instituto de Salud Pública de Serbia, donde el tenista se había hecho la prueba, podría haber cambiado el resultado negativo para que su estrella nacional, firme defensor de la libertad de cada uno a la hora de vacunarse o no, pudiera conseguir la exención médica para poder disputar el Open de Australia.

Tras la resolución del juez a su favor, los funcionarios de inmigración australianos comenzaron a investigar una serie de errores y discrepancias relacionados con esa PCR. Además del incumplimiento de los requisitos de aislamiento en Serbia tras dar positivo. Djokovic no guardó las dos semanas protocolarias de cuarentena tras dar positivo como marca la norma de su país. Incluso en su carta en Instagram del miércoles reconoció el error por acudir en día 18 de diciembre, sabiendo ya que estaba infectado, a una entrevista con un periodista del diario francés L’Équipe.

Las autoridades también investigaron el error en el formulario de entrada al país, en el que el serbio marcó que no había viajado fuera de Serbia en las dos semanas anteriores a su llegada, cuando estuvo entrenando en España antes de coger el avión a Melbourne. Un error del que Djokovic echó la culpa a su agente.

La última palabra la tenía el ministro Hawke, hombre fuerte y de confianza del premier australiano, quien ha tomado la decisión de que Djokovic, quien llevaba desde el martes entrenando en las pistas de Melbourne, no pueda pelear para ganar un nuevo Grand Slam.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)