SILVIA FERNÁNDEZ – LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
“Esto enseña mucho”, dijo el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tras visitar el centro de internamiento de inmigrantes de Las Raíces, en Tenerife. Zapatero prometió ayer no regatear medios a Canarias para hacer frente a la inmigración ilegal.

En lo que va de año, han arribado al archipiélago 11.316 extranjeros en situación irregular. El presidente del Gobierno español viajó a Canarias para mantener un encuentro con el jefe del Ejecutivo regional, Adán Martín, quien había solicitado la reunión en reiteradas ocasiones varios meses antes.

Rodríguez Zapatero, que acudió acompañado del ministro de Trabajo, Jesús Caldera, también visitó tres de los cinco centros de internamiento del archipiélago: dos en Tenerife y uno en Fuerteventura. Casualmente, estas instalaciones que han estado muchas veces desbordados se encontraban ayer a un 50% de su capacidad, pues de las 3.476 plazas ayer sólo había ocupadas 1.794. Al término de la reunión, que se prolongó durante una hora, Rodríguez Zapatero reforzó su compromiso “casi personal”, dijo, con Canarias y aseguró que el Estado no regateará medios “ni materiales, ni humanos, ni políticos” para hacer frente a la inmigración ilegal.

El único asunto que quedó en el tintero fue el de los menores inmigrantes. Canarias solicitó a Rodríguez Zapatero una política de solidaridad que permita el traslado a otras comunidades de estos menores, que no pueden ser devueltos a sus países de origen, y el poner en marcha fórmulas con sus países para ayudar en su formación. La petición se quedó sin respuesta.

En la actualidad, el archipiélago acoge a 400 menores inmigrantes en sus 250 plazas. Además, según estima el Ejecutivo regional, cada seis meses llegan en patera unos 100 menores más. En lo que llevamos de año han llegado a las islas 197 menores inmigrantes frente a los 88 de todo el ejercicio 2004 y los 134 de todo el año 2005.

Zapatero visitó acompañado de Adán Martín el centro de internamiento de Hoya Fría y el acuartelamiento de Las Raíces, donde tuvieron como guía para el recorrido a un inmigrante, un joven senegalés de nombre David. Además, el presidente se acercó al muelle de Los Cristianos, que es el lugar al que son remolcados los cayucos interceptados en las aguas de Canarias. Allí, habló con los agentes policiales, de salvamento y voluntarios que atienden a los inmigrantes.

El presidente del Gobierno de España aseguró tras la visita que “situaciones como ésta enseñan mucho”. Asimismo, apuntó tras conocer los centros de internamiento y el “ejemplar” trato humano que reciben los inmigrantes que se “sentía orgulloso” de presidir un país “que contaba con servidores públicos que tienen ese comportamiento con unos seres humanos que sólo buscan vivir con dignidad”. Por la tarde, el presidente visitó en Fuerteventura el centro de internamiento de El Matorral y el SIVE de Puerto del Rosario.

Aunque el presidente no coincidió con ellos, la llegada de inmigrantes no cesó ayer. Un cayuco con 94 personas, todos varones, llegó por la tarde a San Miguel de Abona, en Tenerife. Además, dos personas llegaban a Ceuta nadando desde la costa de Marruecos. Uno tuvo que ser hospitalizado por lo debilitado que se encontraba.