las palmas. La explosión de flujos migratorios desde África a Canarias, adonde han llegado 11.000 irregulares en los últimos meses, ha obligado a la UE a diseñar una nueva política para frenar esta entrada masiva a Europa a través de su última puerta: el archipiélago canario.

Así se puso de manifiesto en la Conferencia euro – africana clausurada el martes en la capital marroquí, de la que nació el llamado espíritudeRabat , por el que los 57 países participantes concluyeron que la cuestión migratoria debe tratarse de forma global desde tres aspectos: el desarrollo, la lucha contra la inmigración ilegal y el fomento de la legal.

Canarias, región española a la que se dirigen hoy la mayoría de los cayucos y las pateras que, en menor proporción, parten del litoral africano cargadas de personas que huyen de su tierra en busca de un mejor porvenir, estuvo presente en esa conferencia porque las islas se han convertido en el último destino de estos flujos migratorios.

todas las islas por igual Por ello, la UE comenzará la próxima semana a desplegar en Canarias los medios marítimos y aéreos de la Agencia Europea para la Gestión de la Cooperación Operativa en las Fronteras Exteriores (Frontex), una medida que persigue mejorar los controles y también evitar tragedias humanas de naufragios y muertes como las que ha vivido Canarias en repetidas ocasiones.

Asimismo, las islas de Tenerife y Fuerteventura, sobre todo, representan el presente y el pasado de los flujos migratorios que se han dirigido al archipiélago en las últimas décadas desde África, continente en el que, a su vez, se ha agravado la pobreza en los últimos 25 años.

Fuerteventura, y en menor medida Lanzarote, fueron a principios de los 90 el lugar al que se dirigían las primeras pateras en las que llegaban pequeños grupos de inmigrantes irregulares de origen africano, en su mayoría magrebíes.

La cercanía de ambas islas con la costa africana, apenas cien kilómetros, abría una nueva puerta de salida para la inmigración, después de implantarse las primeras medidas de control en el Estrecho de Gibraltar, lugar natural de paso entre el continente africano y el europeo.

Sin embargo, esa situación es ya historia, puesto que ahora la inmigración llega a todas las islas del archipiélago.

Miles de inmigrantes, fundamentalmente subsaharianos, han alcanzado en los últimos meses las costas canarias a bordo de cayucos, barcos de pesca artesanales que ahora se utilizan para estos viajes desde Mauritania, Senegal y otros países subsaharianos.

Ahora son más los inmigrantes que se dirigen a las Islas Canarias porque los cayucos son más resistentes y en ellos caben más, entre cincuenta y un centenar. >efe