Madrid – El goteo de pateras con destino a las costas españolas no se
detiene, aunque esta vez el escenario no han sido las Islas Canarias, sino
las playas andaluzas. En esta ocasión, una embarcación en la que viajaban
33 inmigrantes, al menos cuatro de los cuales son menores de edad, llegó
en la madrugada de ayer al puerto granadino de Motril después de ser
interceptada por la Guardia Civil cuando pretendía alcanzar las costas
españolas, según informaron a la agencia Efe fuentes de la Benemérita.
   La patera fue avistada sobre las 22:00 horas del pasado sábado por miembros
del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) a una distancia de seis
millas al sur del término municipal de Torrenueva, y arribó al puerto de
Motril en torno a las doce de la noche de ayer.
   Tres heridos. Una
vez interceptada la embarcación, los sanitarios de la Cruz Roja atendieron
a tres de los tripulantes que iban a bordo, y que presentaban diferentes
lesiones.
   Según las fuentes consultadas, a su llegada los
inmigrantes manifestaron que llevaban tres días en alta mar, extremo que
fue descartado por los Servicios Sanitarios ya que la mayoría de los
tripulantes se encontraban en buenas condiciones.
   Los inmigrantes
han sido puestos a disposición de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del
Estado y se encontraban ayer en el Centro de Acogida del puerto de Motril,
a la espera de poder ser devueltos a su país de origen en las horas.