La inmigración ilegal que llega a Canarias le supondrá a España un coste de 40 millones de euros para el periodo 2005 – 2008, cifra que evidencia el esfuerzo que asume en el control de la frontera exterior de la UE, según informó ayer el director general de la Policía, Víctor García Hidalgo.

El responsable policial reconoció, durante el primer encuentro de las redes regionales de oficiales de enlace de inmigración en Africa Occidental, que se celebró en Las Palmas, que «ni Mauritania ni Senegal tienen estructuras, medios ni procedimientos para realizar no ya un control de flujos migratorios, sino ni tan siquiera una vigilancia adecuada de sus extensas costas».

Canarias se convertirá en el centro de coordinación europeo de las Redes Regionales de Oficiales de Enlace de inmigración irregular en Africa Occidental, según el acuerdo alcanzado ayer entre los países que participan en esta iniciativa del Consejo Europeo, cuyo objetivo es el control de los flujos migratorios desde Africa a Europa. El centro estará situado en la Jefatura Superior de Policía de Canarias, en Las Palmas. También se acordó establecer otro punto de coordinación de enlaces en Africa, concretamente en Senegal.

A nuestro país se le ha encomendado la llamada red 1, que está integrada por Mauritania, Malí, Senegal y Ghana; y a Francia, la red 2, integrada por Nigeria, Níger, Argelia y Marruecos.

Por otra parte, la misión de vigilancia en las costas canarias y africanas que iba a realizar la Agencia europea de control de fronteras exteriores de la UE (Frontex) se ha retrasado y no comenzará a mediados de mes como estaba previsto, sino que se pondrá en marcha a finales de julio, en el mejor de los casos.