Madrid – El Ministerio de Trabajo ofreció ayer, como todos los meses, los
datos del paro y de afiliación a la Seguridad Social. Aunque el dato del
paro ha sido positivo, no puede decirse lo mismo de la afiliación.
   El número de afiliados a la Seguridad Social subió en junio en sólo
2.527 personas, el 0,01% respecto al mes anterior, con lo que el total de
cotizantes se situó en 18.642.858 personas. Los datos del pasado mes son
los peores de la serie histórica desde que se comenzó a elaborar en 1982.
De hecho, el portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, Vicente
Martínez Pujalte, aseguró ayer que el incremento de afiliación a la
Seguridad Social del pasado mes de junio es el peor que se registra en los
últimos veinte años y constituye una «nueva señal de alarma» respecto a la
situación de la economía española, ante la que el Gobierno debería
«reflexionar».
   Martínez Pujalte destacó que aunque el
Ejecutivo quiera «enmascararlo», la evolución de la afiliación es un «mal
dato» porque el incremento en 2.527 ocupados – el 0,01% respecto al mes
anterior – es el menor registrado en junio en dos decenios.
   Además,
recalcó que estos resultados son «una nueva señal de alarma» que se une al
incremento de la inflación, las hipotecas y la tarifa eléctrica y que
«viene a confirmar» que, «a pesar de la buena inercia del crecimiento, hay
estrangulamientos que implican peligros a corto o largo plazo». El
Gobierno, en lugar de «no hacer nada» o tomar decisiones equivocadas
debería reflexionar, acometer «reformas más serias» y controlar el «gasto
público» añadió.
   Inmigración. La afiliación
podría estar sufriendo el final de los seis meses de regularización de
trabajadores inmigrantes. Una vez pasado el tiempo obligatorio para
legalizar la situación a los irregulares, o bien el empresario ha optado
por dejar de pagar las cuotas a la Seguridad Social o bien el propio
trabajador ha dejado de hacerlo. Esta situación provocará una pérdida de
ingresos para la caja de la Seguridad Social.
   Los Servicios Pblicos
de Empleo tuvieron un gasto en prestaciones de desempleo de 1.122,9
millones de euros en mayo, un 7,3% más.
   El gasto en las
prestaciones percibidas por extranjeros alcanzó los 52 millones de euros,
un 28,5% más que en mayo de 2005. En relación con el gasto total, el pago
de prestaciones a extranjeros representó el 4,6%. El número de perceptores
extranjeros de prestaciones por desempleo ascendió en mayo a 63.650, cifra
que representa un aumento del 22,9% respecto al año anterior y que es
superior entre los procedentes de países no comunitarios.