El Movimiento Viviente y SOS Racismo han celebrado un evento modesto para rendir homenaje a las personas que murieron camino a la migración en Hendaya. De hecho, se rindió un homenaje al mismo lugar donde el joven bolivariano Yaya Karamo fue encontrado muerto hace unas semanas después de intentar cruzar el Bidasoa.

3.174; este es el número de muertes contabilizadas en 2020, aunque la movilidad se ha reducido considerablemente debido a la covida. Según los recuentos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) desde 2014, ahora son más de 35.000 personas que partieron en busca de una vida digna y murieron en el camino.

Frente al puente peatonal que une Hendaya e Irún y recientemente cerrado con una red de hierro, tomaron la palabra representantes del grupo sobre los Inmigrantes de la Vida, SOS Racismo y el barco de rescate Aita Mari. Informaron sobre la terrible situación, denunciaron la escasa responsabilidad de los políticos y destacaron la importancia de la solidaridad.

El clima y la justicia social son lo mismo

“La migración se trata de arriesgar la vida, se trata de renunciar a todo, esperar una vida mejor, escapar de la pobreza, la guerra, la represión, los desastres naturales”, recordó Elise, miembro del grupo de trabajo de Inmigrantes Vivos.

Para el movimiento alter-globalista, el cambio climático, como la desigualdad social, es una fuente de migración. “Es un problema global y diverso, y eso es lo que enfrentamos hoy: defender la justicia climática, al mismo tiempo, es defender la justicia social”. Otro portavoz del grupo, Gabriel, agregó: “Las fronteras no pueden verse como un juego en manos de los políticos: los pueblos europeos persiguen políticas asesinas. Estos deben detenerse. Nuestra gente demanda políticas de acogida decentes, inmediatas y prácticas: hay que construir puentes, no muros ”.

Posteriormente, una cadena de personas se acercó a las orillas del Bidasoa para una ceremonia de homenaje. Algunos militantes vivos han revelado un fresco con una foto tomada por un artista exiliado con los nombres de 35.000 víctimas conocidas y una foto del infame Aylan Kurdi (un niño encontrado muerto en una playa en Turquía en 2015). Los militantes también han detenido un retrato de Yaya Karamoko para rendir homenaje a este último.

“Se ahogó entre dos puentes” La

escritora y activista Marie Cosnay cuenta la historia de un joven que fue encontrado muerto el 22 de mayo de 2021: caminaba) y se ahogó entre dos puentes. […] No te olvidaremos, Yaya Karamo, y no te olvidaremos, XXI. En este siglo es posible depurar cuerpos, nombres, familias y memorias colectivas ”.

El homenaje se completó con un aurresku, un minuto de silencio y una ofrenda floral descansando en el Bidasoa. Bizik ha extendido su invitación a unirse a su grupo de trabajo sobre Inmigrantes, para seguir sensibilizando sobre el tema migratorio, condenando las políticas migratorias indignas y fortaleciendo la red de apoyo y solidaridad en el País Vasco Norte.