PAMPLONA. Agentes de la Guardia Civil de Navarra han detenido a 28 personas y se han incautado del mayor alijo de hachís intervenido por este Cuerpo desde hace ocho años, con 46 kilos de esta droga, en una operación que ha logrado desmantelar tras dos meses de investigación una amplia red de suministro y venta de sustancias estupefacientes en la Ribera a la que también se relaciona con estafas mediante tarjetas de crédito y contrabando.

Una parte importante de este dispositivo, al que se le ha dado el nombre de Baco , se ha centrado en localizar a un grupo de personas que pudieran estar realizando labores de distribución de pequeñas cantidades de droga en la zona sur de la Comunidad Foral.

Por ello, entre el 20 de mayo y el 13 de junio fueron detenidas trece personas en Cintruénigo, Cascante y Tudela. Sus edades oscilan entre los 25 y los 53 años, son todos varones y dos ellos son naturales de Colombia y Marruecos.

Fue precisamente este último, H.O., un vecino de Barcelona de 32 años, quien tenía la mayor parte de la droga en su poder. Efectivos de los Grupos de Acción Rápida (GAR) le dieron el alto el 27 de mayo en el kilómetro 96 de la carretera N – 113, en el término municipal de Cintruénigo. Al registrar la furgoneta en la que viajaba, una Citroën Berlingo blanca, aparecieron paquetes de hachís que sumaban 46 kilos.

NIVEL SUPERIOR Las gestiones del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (Edoa) y del grupo de Policía Judicial de Tudela permitieron profundizar en las pesquisas que hasta ese momento se habían desarrollado. Se trataba, indicaron ayer durante la presentación del operativo, de desmantelar todo el grupo.

Y es que las dificultades para llegar a niveles superiores en esta investigación fueron considerables. Los integrantes de la red no se solían comunicar entre sí, adoptaban medidas de seguridad extremas en sus desplazamientos y aplicaban en cada movimiento o transacción de droga una elevada compartimentación.

Aún así, el 16 de junio fue detenido en Cintruénigo C.C.M., un tudelano de 35 años afincado en Murchante a quien la Guardia Civil atribuye el papel de cabecilla o “principal distribuidor de drogas” en la Ribera.

Con un expediente policial reducido (sólo le consta una detención anterior en junio de 1996 por un incidente de tráfico), se trata de un buen exponente de las dificultades de seguimiento ya descritas. Así, en más de una ocasión se han abortado seguimientos practicados sobre su persona debido a las medidas de contravigilancia que adoptaba, tanto a pie como en coche.

Cambios de dirección repentinos, maniobras en rotondas o desplazamientos a gran velocidad son sólo algunas de las dificultades a las que ha tenido que hacer frente la Guardia Civil.

Aquel mismo día también fueron interceptadas catorce personas con edades entre 20 y 40 años en Tudela, Murchante, Cortes y Madrid. De entre todas ellas destacan varias por el papel que se les atribuye en este grupo desmantelado.

La primera es D.A.C., un pamplonés de 29 años afincado en Tudela. Los responsables de la operación destacaron su estrecha vinculación con el supuesto “cabeza visible” de esta red, C.C.M.

A otros detenidos en esta segunda fase de la investigación, es el caso de O.G.M., vecino de Cascante que fue arrestado el 3 de junio, J.L.M.O., de 33 años y afincado en Burgos, y D.S.M., de 32 años y mismo lugar de residencia que el anterior. A todos ellos se les intervino alguna sustancia estupefaciente y, en el caso de los burgaleses, fueron interceptados el 14 de junio en Tudela en mitad de un viaje. En el interior del turismo que ocupaban había una pequeña cantidad de cocaína.

Finalmente, y en cuanto a las personas detenidas en Madrid, destaca el caso de un matrimonio. El es R.T., de 33 años y natural de Rouiba (Argelia) y ella A.E.N., de 26 años y nacida en Guinea Ecuatorial. Se cree que el primero está relacionado con la compraventa de género de contrabando.

De hecho, en uno de los once registros practicados en esta operación se intervinieron 2.000 cajetillas de tabaco ilegal, 436 frascos de perfume de alta gama, 5 ordenadores portátiles, 31 teléfonos móviles de alta gama, 2 cámaras fotográficas digitales y 11 lápices de memoria USB.

El tercer arrestado en Madrid, J.M.D.M., argentino de 61 años, es quien presuntamente se encargaba de duplicar tarjetas de crédito para realizar compras fraudulentas. Como recordó ayer el coronel Luis Iglesias, responsable de la Guardia Civil en Navarra, 48 de estos instrumentos de pago estaban preparados para su uso.

Además de los 46 kilos de hachís, 2.500 dosis de cocaína y 1.000 de speed , también se han intervenido 11 vehículos, 60.811 euros, una pistola simulada, cinco básculas de precisión y dos armas blancas.