La Matriculación en Centros Concertados

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EN la matriculación prevista para el curso 2006 – 2007 se ha producido un incremento en la demanda de plazas en los centros concertados de Navarra (en torno a 3 puntos porcentuales). Ante este hecho, algunos responsables de centros públicos de nuestra Comunidad, en lugar de reflexionar sobre los motivos que han producido ese cambio, han realizado una serie de manifestaciones intentando justificarlo que requieren unas puntualizaciones.En el Informe sobre el Sistema Educativo en Navarra correspondiente al curso 2004 – 2005 elaborado por el Consejo Escolar de Navarra, se señala que, escolarizando a un porcentaje del 36,5 % del alumnado, el gasto público en la red concertada fue de un 25% del total. Es decir, una diferencia de 11 puntos porcentuales entre alumnos y gasto que, evidentemente, se convirtió en un diferencial positivo en la red pública.

De esta manera, el gasto real por alumno fue de 4.923 en la red pública y de 2.842 en la red concertada. Es decir, por cada 100 euros de gasto por alumno en centros públicos fueron 57 los gastos públicos por alumno en la red concertada.

Por otra parte, la distribución del alumno inmigrante fue de un 80% en la red pública y 20% en la concertada, en tanto que el alumnado con necesidades educativas especiales se escolarizó en un 56% en centros públicos y un 44% en centros concertados.

A la vista de estos datos ¿se puede afirmar que los centros concertados no están suficientemente implicados en la escolarización de los alumnos extranjeros y con necesidades educativas especiales (NEE)? Pues no, más bien al contrario. Queda absolutamente claro que con un déficit de 11 puntos entre alumnos y financiación pública recibida y con un gasto por alumno de un 57% de lo que cuesta el alumno en la red pública, sorprendentemente se escolariza a un 20% de los alumnos inmigrantes, lo que sin duda es gracias al esfuerzo y dedicación de centros y profesores para ofrecer la mejor atención posible a familias y alumnos. Lo equilibrado, de acuerdo con los fondos públicos recibidos, sería una matriculación en torno al 13% del alumnado extranjero.

El caso de NEE es todavía más significativo. El que un 44% de los alumnos con discapacidad, trastorno de comportamiento o sobredotación matriculado en centros ordinarios lo haga en centros concertados ¿es también un riesgo de fractura social? ¿Está «equilibrado»?

Cuando se afirma que debe existir un «reparto equilibrado» entre los centros que reciben fondos públicos, no se debe olvidar cuál es el «equilibrio» del reparto de esos fondos públicos y, tal como se demuestra con datos, el «equilibrio» es claramente desfavorable para los centros concertados.

El Departamento de Educación dotó el curso pasado con 65 profesores de integración para la atención a inmigrantes de los cuales 4 (el 6%) fueron para la enseñanza concertada. A la red pública fueron 61 (el 94%). Otra muestra más de «equilibrio».

Efectivamente, en algo tienen razón nuestros «críticos», la enseñanza concertada en Navarra sale barata, demasiado barata…, pero para el contribuyente navarro. También echo en falta estas mismas críticas (riesgo de fractura social, segregación escolar, etc. ) en lo que respecta a un importante sector, sobre todo en enseñanza pública, que escolariza a más de 18.000 alumnos y cuyo porcentaje de inmigrantes es bajísimo. Me refiero al modelo D. Cabría llegar a la conclusión de que los directores de institutos públicos de Navarra opinan que el modelo D provoca fractura social, segrega a los alumnos y los educa en una situación al margen de la realidad. Al no referirse a este modelo, con un número de alumnos tan significativo, no sé si es que se olvidan de ellos u opinan que, en este caso se ha de respetar, el proyecto y la libertad de los padres.

Desde la Asociación de Centros de Enseñanza de Navarra, plenamente conscientes de los problemas derivados de la incorporación a nuestro sistema educativo de un gran número de alumnos procedentes de otros países, hemos hecho propuestas concretas que puedan permitir la mejor integración posible.

– Aulas de enlace previas a la incorporación al sistema ordinario en donde se trabajen aptitudes (incluido el idioma) y actitudes.

– Colaboración, mediante programas y convenios, con profesores de los países de origen de los alumnos para facilitar el enlace y la integración posterior.

– Dotación de profesorado y recursos a los centros que se significan en este trabajo.

En definitiva, propuestas que mejoren la situación de colegios, alumnos y profesores, para que Colegios como el Ave María de Pamplona, merecidamente premiado por su excepcional labor con niños de una enorme diversidad de países puedan continuar una importantísima labor para el futuro de nuestra sociedad.

Francisco José Flores Pérez es

presidente de la Asociación de Centros de Enseñanza de Navarra