Los medios pueden evitar la xenofobia

ROCÍO RUIZ / Periodista

La Razón, 26-06-2006

Nadie duda del poder de los medios para modelar la opinión pública. Lo
mismo tienen capacidad para frenar abusos de las administraciones, como
acercan al lector a situaciones sangrantes que mueven a la solidaridad. O
todo lo contrario. En Francia, por ejemplo, el tratamiento informativo que
se hizo de la inmigración asociada a la delincuencia fue lo que aupó al
partido ultra de Le Pen en la primera vuelta de las presidenciales de
2002. El enfoque que den los medios de comunicación es crucial para evitar
manifestaciones de racismo y xenofobia.
   La información sobre
inmigración ha evolucionado a medida que el fenómeno ha ido creciendo. En
1998, el primer año de fundación de LA RAZÓN, se publicaron una media de
250 noticias relacionadas con el tema. Ocho años después, 700. Hoy, es uno
de los temas estrella de las secciones de Nacional de los periódicos. El
contenido también ha ido variando con los años. Si en 1996 se hablaba de
folklore y pateras, hoy el enfoque es prácticamente político ligado a la
intensa actividad legislativa que se ha generado para regular un fenómeno
que ha crecido a doble velocidad que en el resto de países. A esta
circunstancia hay que añadir la utilización política que se ha hecho del
tema, que los mensajes positivos sobre la inmigración no «venden» y que
los medios no han contribuido a desterrar tópicos ni a mejorar la imagen
de los inmigrantes. El reto estaría en que se convirtieran en plataformas
de información fiable para los colectivos que llegan, como ocurrió a los
inmigrantes que a principios del siglo XX llegaban a Nueva York. Los
periódicos fueron un instrumento del que se sirvieron para aprender un
idioma y comprender una sociedad con la que existía un salto cultural más
abismal que el que puede haber ahora para un subsahariano y un europeo.
   

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