El Grec abre hoy (22.00 horas) su 30ª edición con una propuesta musical con ambición multicultural: Plurals une las voces y las canciones de Quico Pi de la Serra, Javier Ruibal y Jabier Muguruza en diálogo con músicos africanos y latinoamericanos. Un concierto en el Teatre Grec que trasciende el propio repertorio y plantea metáforas sobre el diálogo y el mestizaje. “Incide en el debate de las diferencias culturales, que unen más que separan y son una realidad cada día más patente”, señala Pi de la Serra.
Plurals parte de una composición del mismo título compuesta por el cantautor barcelonés; la única inédita que sonará en el concierto. Cada uno de los tres artistas interpretará cinco piezas propias, y la gran novedad la pondrá el tratamiento sonoro que imprimirá un grupo de ocho músicos dirigidos por el brasileño Munir Hossn. Instrumentistas de ese país latinoamericano y de Argentina, Cuba y Senegal aportaran un encuadre inédito a los respectivos repertorios. “La banda reflejará esa idea de pluralidad hacia la que va nuestro país”, opina Javier Ruibal.
El concierto exhibe, por lo tanto, una misión: demostrar, en el campo musical, que la multiculturalidad es posible intentando que el enunciado no eclipse al contenido. “No me gustan las cosas que se sacan de quicio. La función de los músicos es divertir y emocionar, y aborrezco el panfleto. Pero creo que las canciones pueden tener una intención”, señala Ruibal. El gaditano recuerda que sus grupos siempre han incluido músicos extranjeros. “Y ahora, en este recital, serán ellos los que darán el tinte musical”, celebra el autor de Pensión Triana, que ya auguraba este tipo de diálogos en algunas canciones repescadas en Plurals, como La reina de África. “Una invitación a los pueblos africanos para que vean que ésta es su tierra si ellos lo deciden”, explica.

¿INFLUENCIA SOCIAL?
Jabier Muguruza, menos dado a declaraciones que superen el marco estricto de su labor compositiva, aporta un punto de distanciamiento. “Yo no creo mucho en la influencia del arte en la sociedad. No creo que una canción cambie a nadie, sino que el proceso es inverso: quien ya tiene una idea, se acerca a ti para reafirmarse en ella”, reflexiona el cantautor de Irún. “Las culturas y el entendimiento están bien, pero yo me he apuntado a esto por la gente que participa y para ver las posibilidades que tienen mis canciones de tomar otra vida, jugando con ellas y poniéndoles otros trajes”, explica.
El trío espera que Plurals, un recital ideado por Daniel Negro, responsable del Harlem Jazz Club, viaje más allá de su presentación en el Teatre Grec, y está en el aire una nueva escenificación en la Mercè. El problema será sincronizar agendas. Muguruza sigue presentando Abenduak 29 y Ruibal sopesa varios proyectos (un disco con la Orquesta Manuel de Falla y otro de dúos). Pi de la Serra reconoce que se acerca su cita con los estudios tras 11 años de sequía discográfica, aunque no parece muy convencido. “Me están presionando para que grabe, pero que alguien me explique porqué tengo que hacerlo. Un disco es un producto comercial que hace un editor para vender y, luego, si no vende, te echa la bronca a ti”, resume.