El 10% de inmigrantes chinos no entiende ni catalán ni castellano

El Mundo, 22-06-2006

El 7% de las mujeres marroquíes son analfabetas mientras que los hombres son los más perjudicados por el paro y la precariedad laboral No es que sean despistados o que tengan pocas ganas de escuchar cuando se les pregunta. Es que no entienden ni palabra.


En un estudio piloto realizado por la Generalitat así se señala: el 10% de los chinos que residen en Cataluña no entienden ni catalán ni castellano. «Los chinos son los menos motivados en el momento de utilizar tanto el catalán como el castellano, uno de cada diez no entiende el castellano y la proporción de los que no entienden el catalán dobla el resultado obtenido si lo comparamos con las otras nacionalidades». El estudio realizado por el Centre d’Estudis d’Opinió se ha centrado en cuatro grupos de inmigrantes, en función de su origen y del número de personas que residen en Cataluña. Rumanos, chinos, ecuatorianos y marroquíes son el objeto del informe.


Algunos de los resultados son decepcionantes, al menos para aquellos que creen en el idioma como herramienta de integración. Y cuando esa herramienta es el catalán, la cosa empeora. Porque no son sólo los chinos los que ignoran esta lengua, los inmigrantes en general muestran poco interés.


Evidente es que «la lengua que predomina en el ámbito familiar y de amistades es la del país de origen». Lo que no estaba tan claro es que «el uso del catalán es minoritario», es más, «son pocos los inmigrantes que lo entienden». Y todo, cuando la Generalitat ofrece cursos de catalán gratuitos, clases a las que los inmigrantes dicen querer apuntarse pero que «la realidad nos demuestra que son una minoría los que finalmente acaban realizándolos».


Los marroquíes y los rumanos son los que más usan el catalán, aunque suponen sólo «un 15» del total. La formación de los inmigrantes es un punto destacado de este informe, que incide en señalar que los marroquíes son los que menos formación tienen. Entre las mujeres de Marruecos, este índice se convierte en un factor importante porque el 7% de las mujeres marroquíes que viven en Cataluña son analfabetas.


Es el colectivo de este país el que sufre las peores consecuencias de ser inmigrante. Y es que los hombres de Marruecos son los que más padecen el paro y la precariedad laboral. La tasa de ocupación más alta se encuentra entre los rumanos y los ecuatorianos, «que tienen entre ellos una situación laboral muy similar». Los chinos, mientras, señalan en el «extremo opuesto» ya que «tres de cada cuatro trabajan en un negocio propio».


Con todo, «tres de cada cuatro inmigrantes recomendaría a otras personas venir a nuestro país», porque consideran que «su nivel de vida ha mejorado y la percepción general es que lo seguirá haciendo». Por este motivo, «son muchos los que desearían traer a algún familiar o amigo». Y es que «la mayoría tiene decidido que se quedará para siempre en Cataluña».


En esta línea, afirman que «la acogida que han recibido es positiva», aunque «una tercera parte asegura haberse sentido discriminada en alguna ocasión, sobre todo mediante agresiones verbales procedentes de desconocidos por la calle». No es la xenofobia, sin embargo, el problema que más preocupa a estos extranjeros. «»Los principales problemas que los inmigrantes creen que tiene Cataluña están fuertemente relacionados con los que afectan directamente a su día a día: el paro, la precariedad laboral y el acceso a la vivienda».Aunque la La Ley de Extranjería parece uno de los principales escollos que encuentran los inmigrantes, la cotidianidad es la que suele reinar en sus vidas así que esta normativa no aparece entre los problemas que afectan a sus vidas.

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