Antes de que acabe esta semana, el Gobierno central presentará un plan de choque para dar una respuesta a la situación de la inmigración en Canarias. Así lo anunció ayer el presidente autonómico, Ángel Víctor Torres, en una comparecencia ante los medios con la ministra de Turismo, Reyes Maroto, e indicó que estos últimos días ha hablado con Pedro Sánchez y con los distintos ministros con responsabilidad en materia migratoria para encontrar una solución a la acogida. «Los ministerios han trabajado, se han coordinado» y esta misma semana ya se podrá tener una salida «inmediata» al repunte en la llegada de pateras y cayucos.

Reiteró el presidente que en este espacio el viernes había unas 500 personas pero el domingo ya eran 2.000. «El flujo es de tal calibre que es imposible la acogida con los medios que tenemos», apuntó.

INDEFENSIÓN JURÍDICA
Denuncia
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) denuncia la «clara indefensión jurídica» en la que se encuentran los inmigrantes.
Por grupos
La ONG muestra su preocupación por que los acuerdos de devolución se estén tramitando por grupos y sin presencia de abogados.
Espacio
CEAR reclama un espacio adecuado para que puedan ser atendidos por sus abogados en las primeras 72 horas, se les ofrezca información completa de su situación con interpretes de su idioma.
El hacinamiento en Arguineguín atenta contra la dignidad de las personas inmigrantes y desborda las tareas de atención y custodia que llevan a cabo Cruz Roja y la Policía Nacional, pero también afecta a la organización e identificación que se lleva a cabo en el muelle. «Cuando vamos a hacer la reseña de una patera de 40 inmigrantes, de repente te das cuenta de que solo tienes 20 personas. Entonces hay que buscar a los otros 20 por el campamento. A lo mejor los encuentras a todos. Igual solo encuentras diez. ¿y los demás? El problema es que pasan de un grupo a otro», indica un agente.

El secretario general del sindicato de la Policía Nacional Jupol en Canarias, Aarón Tanausú Herrera, señala que al déficit de personal que sufre este cuerpo se suma esta falta de organización en el puerto. «A veces, dice, hay tanta gente sentada por el suelo que no podemos pasar de un lado a otro del muelle». Y es que ayer había en estos 400 metros cuadrados un total de 1.866 personas y entre 20 y 30 policías por turno, un cifra que califica de insuficiente.

Por eso, reclama que se establezca «un mando único» para organizar este espacio «y que todos podamos trabajar mejor en estas condiciones». Para Herrera, es «urgente» que se ponga en marcha el centro de Atención Temporal (CATE) anunciado en el antiguo polvorín de Barranco Seco porque en Arguineguín «no se dan las mínimas condiciones para que estén estas personas, que siguen durmiendo en el suelo, a 40 grados por el día y con mucho frío por la noche».

Otra de las voces que reiteradamente ha pedido el desmantelamiento del muelle de Arguineguín es la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR). desde esta organización se califica como «insostenible» la situación que se vive en este espacio y un portavoz apunta que es «insoportable ver cómo se ha ido degradando la situación de las personas». En su opinión, «no es posible mantener un campamento en este lugar, cuya función es simplemente la del desembarco de personas rescatadas, pero nunca de acogida». CEAR insiste en que el desalojo «debe ser inmediato. No es cuestión de pocas semanas», como dijo recientemente el ministro de Interior, Grande Marlaska en su visita a Gran Canaria.

Insiste en que la evacuación de Arguineguín se debe producir «cuanto antes» y disponer un lugar en el que se pueda dignificar la acogida y seguir los protocolos y necesidades que surjan del movimiento migratorio y que ha ido aumentando respecto a meses anteriores. En este sentido, la organización señala que la llegada media de inmigrantes en agosto fue de 26; en septiembre subió a 75 de media y en octubre se elevó a 170 llegadas al día, cifra que se ha superado en noviembre.

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