l vicepresidente del Gobierno autonómico, con competencias en materia de inmigración, Román Rodríguez, insistió ayer en que los traslados de las personas que cruzan la frontera marítima entre Canarias y África Occidental a bordo de pateras y cayucos es la mejor solución para afrontar el problema que en las islas supone el aumento de este tipo de embarcaciones en un pequeño espacio de tiempo.

Rodríguez se manifestó así en la Comisión de Asuntos Europeos, en la que el diputado del grupo Nacionalista, Juan Manuel García Ramos, se interesó por las gestiones que realiza el Gobierno de Canarias en este ámbito.

El también consejero de Hacienda aseveró que «la crisis que estamos viviendo solo puede tener una respuesta operativa que es la derivación al continente si estas personas no son repatriadas», e insistió en que así se «superó la segunda crisis migratoria, la más importante» que ha registrado Canarias y que, según apuntó, coincidió con su mandato como presidente de la comunidad autónoma.

Por lo tanto, Rodríguez dijo esperar que la visita prevista para este viernes día 6 de la comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, junto al ministro español del mismo ramo, Fernando Grande-Marlaska, «sirva para que, de una vez, perciban y respondan al fenómeno migratorio».

Pacto europeo
A la espera de la misma, García Ramos le interpeló por el Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo elaborado por la Comisión Europea, pese a recordar que el vicepresidente ha reducido este documento a «literatura» porque, aclaró ayer el consejero, «a las sociedades opulentas de Europa le preocupa poco la inmigración».

En cualquier caso, tanto el diputado nacionalista como la socialista Teresa Cruz, abogaron para que el Gobierno autonómico haga valer el artículo 198 del Estatuto de Autonomía y reclame su «capacidad de influencia en los tratados internacionales».

Cruz señaló que en el documento europeo «no está definida ni una política de acogida, ni su financiación así como tampoco la distribución solidaria de estas personas», por lo que consideró que «es ahí donde tendrían que estar actuando todas las instituciones y todos los partidos».