Un delincuente chino mata a dos empresarios andorranos en un hotel de lujo del Principado y se suicida
El homicida entró en el restaurante, se sentó en la mesa de sus víctimas y les mató a tiros con una pistola con silenciador
Diario Vasco, 24-02-2006BARCELONA. Un hombre de nacionalidad china de 42 años, residente en Barcelona, con antecedentes policiales y adicto al juego, se suicidó ayer tras matar a tiros a dos empresarios andorranos que estaban comiendo en un hotel de lujo de Andorra , según informó anoche la Policía del Principado. El suceso ha ocurrido sobre las 14.30 horas en el comedor del Hotel Roc de Caldes del municipio andorrano de Escaldes-Engordany, explicó el comisario-portavoz de la Policía de Andorra, Ferrán Túnez, que apuntó el móvil del «ajuste de cuentas» como el más plausible, a falta de completar la investigación.
El crimen se ha precipitado cuando el ciudadano chino, cuya identidad no ha sido facilitada por la policía andorrana, entró en el restaurante donde estaban comiendo los promotores inmobiliarios andorranos Antoni S. y su yerno Marc S., y, según algunos testigos, se sentó con ellos. Cuando llevaban un rato conversando, el ciudadano chino se levantó inesperadamente y disparó contra los dos empresarios con una pistola con silenciador. Dos disparos acabaron con la vida de una de las víctimas, mientras que la otra recibió un único tiro en la cabeza que le causó la muerte instantánea.
Una decena de comensales que compartían el comedor del lujoso hotel salieron huyendo del lugar al darse cuenta de lo sucedido.
El homicida, que, según la policía andorrana, regenta negocios mayoristas de zapatos y bolsos en la calle Trafalgar de Barcelona, se sentó y llegó a decir «bueno, ahora que venga la policía a buscarme», pero al instante se apuntó con la pistola a la cabeza y se suicidó.
Adicto al juego
La Policía andorrana, que encontró el pasaporte chino del homicida, constató que tenía adicción al juego, aunque desconoce si la ludopatía podría o no tener relación con los asesinatos de los empresarios.
La confusión reinó en los primeros minutos, hasta el extremo de que algunos testigos habrían explicado que el autor de los disparos había huido tras matar a las tres personas. Ello provocó, según explicó el comisario Túnez, que la Policía andorrana montara una «operación jaula» cerrando las fronteras el país durante una hora y media, lo que provocó un colapso circulatorio. AGENCIAS