Creyeron que era un vecino que estaba quemando rastrojos en su casa. Nada más lejos de la realidad. Lo que ardía bajo los palés de madera eran los cadáveres de tres varones que habían sido ejecutados a tiros en una casa situada a las afueras de Sant Julià de Ramis, en Girona. La patrulla de los Mossos d’Esquadra que divisó el fuego vio a un hombre junto al incendio que, al darse cuenta de su presencia, les hizo señales para que no se preocuparan. Después huyó.

La policía autonómica, como ya adelantó ayer este diario, busca a los inquilinos de la casa junto a la que fueron semienterrados los cuerpos de las víctimas en un hoyo y bajo una pila de palés de madera y escombros. Se trata de una mujer de nacionalidad francesa, y dos individuos, uno de ellos es lituano y el otro podría ser de un país de la Europa del Este. La mujer vivía en la casa desde el 1 de junio con un bebé y uno niño de siete años.

Los forenses practicaron ayer la autopsia a los cadáveres, a pesar de que estaban casi carbonizados. En el lugar de los hechos, los investigadores encontraron un pasaporte europeo y documentación de un ciudadano árabe. De lo que la policía no tiene duda es de que los tres son extranjeros y que, con casi toda probabilidad, fueron víctimas de un ajuste de cuentas. En la casa en la que fueron ejecutados había al menos un agujero de bala.

Pasadas las 6.00 del sábado, una dotación de tráfico de la policía catalana divisó un fuego en la vivienda. Cuando los agentes se acercaron, sin entrar, vieron a un hombre que les hacía señales con los brazos para que no se preocuparan. Los policías, que pensaron que el individuo estaba quemando maleza, avisaron a los bomberos y se acercaron hasta la vivienda, que se encuentra en una zona boscosa y junto a la atopista AP – 7. Al llegar a la casa sólo encontraron el pequeño incendio. Ni rastro del hombre.Había huído. Los investigadores están convencidos que este individuo es uno de los asesinos.

Para dar con los sospechosos, la policía analiza un Renault Clio que había junto a la casa con matrícula fracensa y que pertenece a la inquilina.