María García es presidenta de la Asociación Madres solteras Isodora
Duncan, un colectivo que representa 6.000 mujeres y que presta ayuda a
madres adolescentes o aquellas que han decidido asumir la maternidad
solas. «Me quedé embarazada con 17 años recién cumplidos y fui madre
adolescente, Yo no decidí en ese momento ser madre soltera, pero sí que
decidí no casarme por serlo. Mi hijo fue víctima de la discriminación en
el colegio por tener una madre que no estaba casada». Desde la asociación
que preside, García denuncia que «ser madre soltera sigue siendo un
estigma». A lo que matiza que también depende de la clase social a la que
pertenezcas: « Si tienes un estatus social alto y no necesitas ninguna
ayuda de la familia y de los servicios sociales se ve bien, pero si por
desgracia necesitas recurrir a los servicios sociales para conseguir una
vivienda o un comedor, entonces eres considerada nada, no tienes el
estatus de familia propia y autónoma que deberías tener como familia
monoparental».
   La sobrecarga, la soledad, el desempleo y el
riesgo de exclusión social son los principales problemas a los que se
enfrentan estos modelos familiares. «Nosotros nos llamamos las familias
invisibles, sólo se habla de nosotras cuando se habla de marginación y del
problema de los adolescentes, pero nunca cuando se habla del tema
educacional y de la ley entre otras cosas».
   En la televisión,
en las series la imagen que se intenta dar de madre soltera es la de una
familia incompleta, inacabada e incluso incapaces de mantener y cuidar a
nuestros hijos, nos presentan como a una familia desestructurada. El
modelo de familia siempre es negativo.
   Asociación con más de 6.000
mujeres, a nivel nacional y donde hay muchas hispanoamericanas. 23 años de
andadura
   .
   Problemas a los que se enfrentan es
la precariedad laboral, la falta de dinero y no tener nunca puentes
suficientes para acceder a las ayudas generales que hay en los servicios
sociales porque ayudas específicas para las madres solteras no hay ninguna.
   Se llega a ser madre soltera por muchos motivos: Porque decides tener un
hijo sola, por que decidiste tenerlo con tu pareja pero ésta muere o se
va, o por que son embarazos no deseados.
   A la madre soltera se nos
sigue condenando al matrimonio
   La ley de conciliación de vida
familiar y laboral no contempla a las madres solteras. No existimos en la
ley. No te prohíben ser madre soltera, pero te lo ponen tan difícil que a
veces tiras la tolla y si con un compañero puedes salir adelante…
   El embarazo en adolescentes es un problema muy grave en este país y no se
le pone remedio, los programas de prevención de embarazos que se hacen y
las salidas que se les da son muy limitadas: el aborto, la adopción o
casarse, pero no se les `presenta la opción de ser madres solteras.
   Marta Benet Gimenez, edad 35, Científica
   Eugeni
Camacho Ferrer, edad 33, Músico
   Matrimonio y futuros padres
   El funeral del padre de un amigo común fue el dramático escenario que unió,
hace ahora ocho años, a este matrimonio de españoles afincado en Nueva
York, futuros padres de una niña. No fue un encuentro muy romántico, es
cierto, la situación era extraña, pero así sucedieron las cosas, explica
Marta Benet.
    – Había visto a Eugeni antes, unos diez años antes,
porque tocaba en un grupo de música del que yo era una fan, pero en ese
momento no me interesó. En el entierro estuvimos hablando de muchas cosas,
y sobre todo de música. Yo quería aprender a tocar el djembé y andaba
buscando un profesor de percusión. En dos semanas empezamos las clases y
muy pronto comenzó esta maravillosa aventura.
    – ¿Cuanto tiempo
lleváis casados?
    – Desde el 2001, es decir, cinco años.
    – ¿Por qué decidisteis casaros?
    – La razón
principal que nos llevo a casarnos fue la decisión de venir a vivir a
Nueva York. Yo conseguí un contrato de investigación y, por tanto, una
Visa de trabajo. La única manera de que mi compañero no tuviera que salir
del país cada tres meses, era casarnos en España, y así él estaría dentro
de mi Visa También era una forma de celebrar lo mucho que nos queremos,
pero sinceramente, si nos hubiésemos quedado en España, no creo que lo
hubiésemos hecho.
    – ¿Cuantos meses llevas de embarazo?
¿Repetirás la experiencia?
    – Estoy en mi quinto mes de
embarazo. Si que quiero tener mas hijos, al menos uno más porque creo que
no hay nada mejor que compartir las cosas, y si eres hijo único, no lo
valoras tanto.
    – ¿Por qué decidisteis formar una familia, tener hijos?
    – Tenía ganas de tener niños. También estamos llegando al final de una etapa
de nuestra vida, vivir en Nueva York, y pensamos que sería un buen momento.
    – ¿Crees que faltan ayudas para la familia por parte de la administración
española?
    – Queda mucho por hacer. En realidad, creo que hay muy
poca ayuda para que las mujeres tengamos hijos en España. Al menos la baja
de maternidad es de 4 meses (aqui en Nueva York, legalmente tan solo me
pagan 13 dias), pero creo que debería haber mucha mas ayuda. No existen
casi guarderías públicas, y aún no existe una protección real de mantener
el puesto de trabajo. Conozco bastantes casos, en las que sutilmente y de
una manera muy dificil de probar, tras la baja de maternidad las mujeres
han perdido su trabajo.
    – ¿Dicen que es complicado conciliar la vida
familiar y laboral en las mujeres? ¿Cómo te lo planteas? ¿Dejarás de
trabajar?
    – Si, creo que es bastante complicado. Mi situación va a
ser un poco diferente a la típica de las mujeres. En mi caso, tras los dos
meses que estaré de baja (porque me cogere dias de enfermedad acumulados,
dias de vacaciones y porque mi jefe es una persona legal), mi compañero se
ocupará de nuestra hija en horario laboral. Él no tiene un trabajo fijo y
decidimos hacerlo de esta manera. Pienso que pocos hombres harían eso,
ojalá en un futuro esto cambie. En principio, al menos mientras que aun
estemos viviendo en Nueva York, no dejare de trabajar.
   Mónica Torres
35 años fotógrafa Una mujer embarazada es un estorbo laboralmente
   Esta fotógrafa vive desde hace seis años con su novio Jochen, un alemán del
que se enamoró perdidamente hace ahora siete años y con el que acaba de
tener una niña, Luz Amaya.
    – Nos conocimos por casualidad, por
el destino. Recuerdo que fue un día que había un eclipse de sol. Yo estaba
tomándome un café en una terraza y él también estaba por allí. Cruzamos
varias miradas, fue un flechazo, no podíamos dejar de mirarnos, pero no
hablamos. Luego, por la noche, quedé a cenar con mi hermana, que vino con
unos amigos, Jochen era uno de ellos. Desde entonces hemos estado juntos.
    – ¿Por qué no has habéis casado?
    – No nos
lo hemos planteado nunca, estamos bien así, yo me siento como pareja igual
con papeles que sin papeles, además me gusta seguir siendo su novia
siempre. No necesitamos un documento que de fe de nuestra unión, nosotros
somos una familia fuera del canon tradicional, pero una familia como otra
cualquiera.
    – ¿Qué tal la experiencia de ser madre?
    – Es maravillosa, Maya Luz tiene ocho meses y cada día está más guapa. Es lo
más bonito y especial que me pasado vida, plantar una semilla y verla
crecer. Queremos más niños, aunque es muy duro, te entregas a ellos día y
noche
    – No debe ser fácil trabajar y cuidar de su hija.
    – No, en casa trabajamos los dos y conciliar la vida familiar con el trabajo
es muy duro, no hay ningún respeto hacia las madres, llevas a tu hija a la
guardería, pero si se pone enferma no puedes dejarla en ningún sitio.
    – ¿Faltan ayudas para las madres?
    – Sin duda. El
sistema debería dar facilidades a las madres, creo que la baja de
maternidad habría que prolongarla más de cuatro meses. Si eres mujer
trabajadora te dan cien euros al mes, pero eso no te da para pañales.
Tener hijos supone mucho gasto, el sistema piensa que vas a recibir apoyo
pero ellos deberían ser los primeros en ayudarte. Las mujeres criadoras
deben recibir más apoyo de la Administración, pero desgraciadamente una
mujer embarazada es un estorbo laboralmente. La figura del padre también
debería estar más apoyada, darles tiempo para estar con sus hijos. .
   La OMS recomienda seis meses de lactancia y hasta dos años una toma de
alimentación, incentivar las ayudas a las madres, estamos a la cola de
europa
   En un futuro si es mejor para Maya lo haríamos, por
   El hecho de firmar papeles no da seguridad. Emocionalmente no es necesario,
igual hacer una fiesta para celebrar el nacimiento sí. Somos una pareja
muy sólida, si tuviéramos cambiar que país o alguna enfermedad de los dos.
    – ¿Sientes
   La sociedad te obliga a casarte en
cierta manera, Johen es alemán, te reconduce hacia el matrimonio. Yo no
necesito un papel que diga que es mi pareja. Somos una unión, me ha
cambiado la vida, sólo vivo para ella.