Roma, 23 sep (EFE).- El presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, calificó de importante paso hacia una política migratoria europea el nuevo plan presentado hoy por la Comisión Europea (CE), pero pidió garantías respecto a las repatriaciones y las redistribuciones.

“Se necesitan garantías sobre la repatriación y la redistribución. Los países de llegada no pueden gestionar solos los flujos en nombre de Europa”, escribió Conte en las redes sociales.

La CE presentó este miércoles un nuevo plan sobre migración y asilo que pretende facilitar las devoluciones de quienes no tienen derecho a pedir protección internacional, la mayoría de los que llegan a la Unión Europea (UE), y no incluye cuotas obligatorias de acogida.

El paquete de medidas introduce un mecanismo de “solidaridad obligatoria”, que se activará cuando un país esté bajo presión o en una situación de “emergencia”.

En el caso de los migrantes rescatados en el mar, se procederá a acoger a quienes necesiten protección, sobre la base de un sistema de contribuciones nacionales basado en aportaciones voluntarias.

Por su parte, los parlamentarios del antisistema Movimiento 5 Estrellas (M5S) afirmaron que “la propuesta de la Comisión Europea sobre el paquete de inmigración y asilo es un buen punto de partida para superar el sistema de Dublín, pero debe mejorarse”.

El objetivo del Convenio de Dublín es determinar qué miembro de la Unión Europea ha de hacerse cargo de la solicitud de asilo de una persona cuando llega a territorio europeo, aunque el principio que más se aplica es el del país de llegada.

Según los miembros del M5S, "el principio del primer desembarco no se supera, sino que solo se ve mitigado por un principio de solidaridad que, de hecho, deja a Italia sola para gestionar la primera recepción y las solicitudes de asilo, lo que obliga a otros países de la UE a proporcionar ayuda financiera y pagar la repatriación, lo cual debe hacerse en ocho meses ".