Arguineguín (Gran Canaria), 7 sep (EFE).- La alcaldesa de Mogán (Gran Canaria), el municipio al que pertenece Arguineguín, Onalia Bueno (Ciuca), ha solicitado un mando único para la gestión de la llegada de pateras, además de solidaridad territorial para acoger a los inmigrantes, porque asegura que “la paciencia tiene un límite” y que se pueden ver abocados a “tener que tomar medidas”.

En un conferencia de prensa ofrecida delante del campamento levantado por la Cruz Roja en el muelle de Arguineguín, donde ayer pernoctaron 332 inmigrantes a la espera de otro recurso de acogida, Onalia Bueno ha asegurado que se plantearán cómo actuar tras la visita que va a realizar en los próximos días a la isla el ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, al que ha invitado a acudir a ese puerto para que “le ponga ojos a la realidad”.

La alcaldesa ha definido la situación actual en el muelle de Arguineguín de “crítica”, ya que muchos de los inmigrantes allí alojados en tiendas de campaña llevan “más de una semana” en este espacio y “sin perspectivas de reubicación”.

A su juicio, el muelle de Arguineguín no reúne las condiciones para el buen estado de estas personas y además tampoco ofrece seguridad. Sobre este último asunto, ha denunciado que esta madrugada tres de los inmigrantes allí retenidos han intentado huir, sin saber aún los resultados de sus pruebas médicas PCR.

Es una situación de “angustia”, ha añadido, en la que el pueblo de Mogán se siente “solo y abandonado” ya que aunque están “haciendo todo lo posible” en coordinación con Cruz Roja, las administraciones que tienen competencia tienen que “buscar ya una solución”.

Para Bueno, la solución pasa por “la gestión que se hizo en el año 2006 (en la crisis de los cayucos), con un mando único que lidere la coordinación entre ministerios”.

Esta una “cuestión de Estado y de Europa”, ha argumentado, que deben dar salida a los inmigrantes llegados a Canarias y los que seguirán viniendo, porque cree que “esta es la punta del iceberg”.

La alcaldesa de Mogán ha anunciado que se posicionará “del lado de los vecinos”, a los que ve preocupados con el tema desde hace más de un año.

Arguineguín es el puerto de referencia de la Salvamar Menkalinan, algo con lo que el Ayuntamiento de Mogán está de acuerdo, pero necesitan “una respuesta más ágil de las administraciones competentes” para “evacuar las pateras que nuevamente se están acumulando” y son “un foco de infección”, y para “de una vez por todas” dar salida y una correcta gestión a los migrantes" que “están y a los que vendrán”, ha asegurado.

La solución, en su opinión, no es que permanezcan en Canarias ni habilitar hoteles como medida temporal, sino una “política coordinada y de solidaridad territorial en España y Europa”.

Si se pudo hacer en 2006 con los 36.000 inmigrantes que llegaron ese año a Canarias, Bueno considera que “se puede volver a hacer”, por lo que apela a la “responsabilidad”.

Del mismo modo ha pedido al ministro de Migraciones, José Luis Escrivá, que visite el muelle de Arguineguín y “le ponga ojos a la realidad”, porque además “nadie ha venido aquí a ver la situación”.

A juicio de la regidora, “no se puede legislar con informes que llegan a Madrid sin ponerle ojos a lo que ocurre en Arguineguín”.

Los diferentes ministerios “tienen edificaciones obsoletas” que se podrían usar para este fin, pero son las mismas administraciones las que “están conteniendo que los migrantes no se alberguen en península”, ha alegado.

Desde su punto de vista, es una “cuestión política” en la que el presidente Canarias, Ángel Víctor Torres (PSOE), debe ponerse “firme”, al igual que municipio y cabildos para “hacer entrar en razón a los ministerios implicados y que tomen en serio a las islas”.

Por su parte, el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Arguineguín, Ricardo Ortega, ha explicado que “desde hace más de un año” piden que haya un protocolo para evacuar las pateras y cayucos.

Como asegura, estas embarcaciones son “un problema de salud pública” y generan un mal olor que resulta “insoportable” para los profesionales del mar que operan en la zona.

Tras el incendio en las pateras del muelle que calcinó varias de ellas el pasado mes de diciembre y de que se volvieran a amontonar 21 más, el compromiso fue “retirarlas con un protocolo” de una manera ágil, algo que no se está cumpliendo ya que a día de hoy hay una veintena en el muelle de Arguineguín, ha dicho Ortega.

La queja de los pescadores no solo pasa por las pateras y por el problema de salubridad sino porque se sienten “engañados”.

A la flota de Arguineguín le preocupan los problemas que se están generando a raíz de esta situación que “está provocando que salten chispas” entre los vecinos, porque “la paciencia aguanta lo que aguanta”, ha advertido el patrón mayor.

Ortega coincide con la alcaldesa en la solidaridad y empatía de los residentes ante el problema migratorio, pero cree que “ya es hora de que las administraciones competentes solucionen y escuchen sus demandas”.

“No nos merecemos esto”, ya que además los responsables están en disposición de “encontrar una solución” si hay voluntad para ello, ha añadido el portavoz de la Cofradía de Pescadores.