Tiene 37 años y desde hace veintiuno reside en Torre Pacheco, donde vive con su esposa y sus cuatro hijos (todos ellos nacidos aquí) y donde preside la Comisión Islámica Clemencia. Ayer, ante el juzgado de San Javier donde declaraban los siete detenidos por el secuestro del niño de Torre Pacheco (seis magrebíes) llamó a evitar un brote racista. «Buenos y malos los hay en todas partes».

– ¿Cómo vive la comunidad musulmana de Torre Pacheco el secuestro del niño y los días posteriores?

– Cuatro delincuentes han traído el follón a todo el pueblo. Nosotros llevamos ya diez años dando pasos adelante por la integración, y la cosa anda. Pero es pronto. A nadie le gusta que pasen estas cosas. Estamos muy preocupados, porque somos pachequeros igual que los demás.

– ¿Conoce a los detenidos?

– Sé que viven en Balsicas y dicen que son críos. Sé que trabajaban en el campo, pero poco más. Con tanta tensión, al final no he visto todavía sus fotos en los periódicos.

– ¿Teme un brote racista?

– Me ha llegado que la gente está inquieta. Este clima de tensión es muy difícil y hay quien no sabe distinguir que no todos somos iguales. Por lo que ha hecho uno, no podemos pagar todos. El bien y el mal está en todo.

– Los inmigrantes magrebíes, ¿se plantean no salir a la calle si la situación se recrudece? ¿Tienen miedo?

– Queremos y confiamos en que todo se quede en la mano de la justicia. Miedo no hay, pero sí preocupación. El 70% de la comunidad musulmana quiere vivir tranquilamente. Se ha comprado ya casa aquí y eso es porque quiere quedarse. Estos casos nos hacen la vida imposible. Estamos deseando que echen a los delincuentes, que son una minoría.

– ¿Por qué cree que hay inmigrantes que deciden cometer delitos ?

– Aquí la ley no es tan dura como en Marruecos. Los que venimos para ganarnos la vida honradamente queremos que la policía diga: ‘A ver, usted, ¿tiene trabajo? ¿Has venido a España a trabajar? Sí, adelante. No, pues ya sabes adónde te vas’.

– ¿Han tenido contactos con las autoridades para evitar desde dentro la delincuencia de inmigrantes?

– Sí. Hemos hablado varias veces con la Guardia Civil y la Policía. Intentamos que los propios inmigrantes denuncien a los delincuentes. Pero muchos no denuncian porque ven débil la ley española. Si uno de su propio país le quitala cartilla del banco, sabe que si le roban menos de trescientos euros no le pasará nada al ladrón.

– ¿Hasta dónde llega este sentimiento de impunidad?

– El inmigrante que no quiere trabajar ve en la televisión que detienen a un grupo de atracadores de bancos y al día siguiente los sacan a la calle. Y lo copia.Los inmigrantes somos los primeros que queremos que haya más seguridad en la Región de Murcia.

– ¿Han intentado hablar con la familia del niño secuestrado?

– Pensamos en mandar a tres o cuatro personas para hablar con ellos. Pero seguramente no era el mejor momento para la familia. Si sirve de algo, pido perdón por el secuestro en nombre de la comunidad islámica. Han sido unas cuantas personas que no representan nuestros valores de respeto y de convivencia en paz.