La campaña CIE NO ha recordado hoy, cuando se cumple un año de la muerte del joven marroquí de 23 años Maouane Abouobaida en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Zapadores (València), que en la historia de estos centros “se han producido más de 11 muertes, en la totalidad de los casos sin el debido proceso de investigación, justicia y reparación a las familias de las víctimas”.

La campaña ha entregado este miércoles en la Delegación del Gobierno su informe “CIE Zapadores, sin derecho a tener derechos”, que presentó el mes pasado, junto a otro informe que responsabiliza al estado español de la muerte del joven marroquí.

“El suicidio de Marouane Aboubaida (…) no parece algo excepcional en una situación de internamiento en los CIE; como tampoco lo es la conducta parasuicida. La diferencia está en que, en esta ocasión, tuvo lugar la ideación y la ejecución posterior” (…) pero faltó “una reacción inmediata que pudiera salvar la vida de Marouane y la del resto de población migrante que terminó con su vida allí”, concluye este segundo informe.

CIE NO ha denunciado que el centro de la calle Zapadores de València no solo ha sido escenario de esta muerte hace ahora un año, sino también de otras vulneraciones de derechos humanos, como el encierro de doce mujeres, muchas de ellas menores de edad y posiblemente víctimas de trata, en algunos casos en el mismo espacio que sus captores.

El informe “CIE Zapadores, sin derecho a tener derechos” da cuenta de las vulneraciones ocurridas en este centro en los últimos diez años, y se centra en el caso de Marouane como “el más grave, pero no el único”.

Así, relata el caso de doce mujeres, “posibles víctimas de trata, algunas menores de edad y en algún caso encerradas al mismo tiempo y en el mismo espacio que sus proxenetas, de las cuales algunas fueron liberadas y desaparecieron sin que se tenga constancia de que ninguna autoridad haya realizado seguimiento a su situación”.

“En los pasados dos años también hemos atendido a 11 menores de edad; la mayoría fueron liberados tras múltiples gestiones, pero nunca debieron ser encerrados”, explica la organización, que cita también otros hechos que deberían ser investigados a pesar de la opacidad, denuncian, con la que el Gobierno quiere cubrir a los CIE.

Por otro lado, la campaña ha hecho pública hoy una nota de prensa en la que señala que la pandemia “ha brindado la oportunidad de comprobar que sin los CIE no se derrumba el modelo migratorio” porque se han vaciado durante el confinamiento sin ninguna consecuencia.

“La dureza desproporcionada de nuestra legislación de extranjería” no es útil, sino que constituye una vulneración de derechos, señalan.