La Policía Nacional se afana en dar con el paradero de dos menores marroquíes secuestrados por unos compatriotas. En Vícar se detuvo ayer a seis magrebíes implicados en los hechos, pero que no han desvelado el paradero de los menores.

Fuentes policiales indicaron que los hechos tuvieron lugar a finales de la semana pasada, cuando un ciudadano marroquí afincado en Toledo denunció al 091 que uno de sus hermanos se encontraba retenido contra su voluntad en algún lugar de la provincia de Almería. El menor habría alcanzado la costa almeriense a bordo de una embarcación que salió de la costa magrebí.

En el momento de la partida se abonó parte del precio del pasaje y el resto del billete sería pagado una vez en suelo español. Sin embargo, al llegar, los familiares de dos jóvenes, de 13 y 17 años respectivamente, se negaron a satisfacer la deuda, que había sido aumentada por la organización mafiosa. Los delincuentes decidieron entonces mantener secuestrados a los adolescentes hasta que sus familiares pagaran.

Tras la denuncia, se puso en marcha un dispositivo policial especial. El hermano de uno de los retenidos llamó a los delincuentes y acordó con ellos fijar fecha, hora y lugar para abonar el importe . El punto escogido fue un paraje del término municipal de Vícar. El operativo permitió arrestar a cuatro hombres y dos mujeres, todos de nacionalidad marroquí, que no iban acompañados por los menores. Fueron conducidos a Comisaría para ser interrogados.

Al cierre de esta edición los investigadores no habían logrado dar con las víctimas. Todo indicaba que se encontraban en un cortijo abandonado de la comarca del Poniente, pero este dato no había sido confirmado oficialmente.