«Que las personas refugiadas puedan permanecer en el estado español y Euskadi en condiciones de dignidad, vivir sin miedo y acceder a los derechos, servicios y recursos públicos, con independencia de su origen y la vía de entrada« ha sido una de las reclamaciones que las asociaciones por los derechos de los refugiados y en contra del racismo han vuelto a repetir con motivo de las movilizaciones que han convocado hoy, Día Mundial de las Personas Refugiadas.

Cientos de personas, 400 según los convocantes, han compuesto una cadena humana esta mañana en Donostia para protestar por la situación de los refugiados que llegan a España. Sin darse la mano, por motivos de seguridad sanitaria, la comitiva ha salido del Aqurium a mediodía para llegar al Ayuntamiento, después de pasar por las calles de la parte vieja Donostiarra. En Alderdi Eder representantes de las asociaciones han leído un comunicado con sus peticiones.

Entre las reivindicaciones, han querido recordar que el problema de los refugiados sigue existiendo y han centrado sus peticiones en la regularización de las personas que piden asilo pidiendo que no se ralentice más los procesos, además de la lucha contra el racismo. Las asociaciones que forman parte de la plataforma convocante, entre las que se encuentra SOS Racismo y Ongi Etorri Errefuxiatuak, han pedido que «las políticas del estado español y del Gobierno vasco no desplacen a las personas de sus lugares de origen ni expolien sus bienes naturales». «Reivindicamos que las personas refugiadas puedan llegar a Euskadi sin poner su vida en riesgo», han añadido.

«Queremos una tierra acogedora, respetuosa con la diferencia, construida con los compañeros y compañeras que hoy conforman nuestras sociedades, con independencia de su lugar de origen, en igualdad de derechos y heterogeneidad de culturas. Fuimos exilio, seamos refugio«, han terminado la lectura del comunicado.

El ‘Aita Mari’ sigue retenido en Palermo
Los miembros de Salvamento Marítimo Humanitario que realizan su labor en el mediterráneo con el atunero vasco ‘Aita Mari’ también han participado en las reivindicaciones con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas. Iñigo Gutiérrez, uno de sus miembros, ha recordado que el equipo médico de la asociación continua en el campo de refugiados de Qios y que el ‘Aita Mari’ sigue retenido en Palermo y que siguen teniendo que pagar el atraco del barco y el mantenimiento de la tripulación, «un coste que no nos podemos permitir«. También ha denunciado que les exigen unos criterios de inspección, »demasiado exigentes«, que no corresponen a su barco y no entiende por qué.

«El covid es una excusa más para bloquear la flota social que realiza rescates en el Mediterráno«, ha manifestado. »Habíamos logrado llegar a una situación en la que nos dejaban zarpar, navegar y rescatar a personas. El covid es un rodillo que ha barrido todo esto«. Ni si quiera pueden hacer la labor de acogida que realizaban con los migrantes que llegaban a las propias playas griegas. »No nos dejan acercarnos, están haciendo devoluciones en caliente. Pero han levantado una especie de telón para que no se vea lo que está pasando«, denuncia.

«Queremos traer el barco aquí, porque el coste sería menor. Pero ni eso podemos. Estamos en el aire, a la espera de que nos den fecha de inspección«, ha terminado.