El PSOE promueve que todas las instituciones europeas condenen ahora el franquismo

El Mundo, 09-06-2006

Pretende debatirlo en Estrasburgo coincidiendo con el 70º aniversario del inicio de la Guerra Civil Ocho europarlamentarios españoles – tres de ellos del PSOE – iniciaron ayer una acción conjunta en Bruselas, a la que ya se han sumado otros 191 diputados, para intentar que todas las instituciones de la Unión Europea expresen su condena al franquismo. La iniciativa también incluye que se repruebe el golpe de Estado que puso fin a la Segunda República en España.


Además del farragoso procedimiento que tiene que superar la iniciativa, estos diputados le han añadido otra dificultad: no han invitado a participar a ningún parlamentario español del Grupo Popular.


La iniciativa, no exenta de polémica, está liderada por los socialistas Luis Yáñez, Carlos Carnero y Miguel Angel Martínez, y también por Raúl Romera, de ICV; Bernat Joan, de ERC; Willy Meyer, de IU; Ignasi Guardans, de CiU, y José Ortuondo, del PNV.


Como trampolín internacional viene respaldada por la petición que hizo el pasado mes de marzo la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa para que se declarara el 18 de julio, fecha del golpe de Estado de Franco, como Día de la Condena Internacional del Franquismo.


Precisamente en el Congreso de los Diputados español hay pendiente una proposición de ley presentada por IU – ICV el pasado mes de enero en la que se pide también que se institucionalice esa fecha como Día Oficial de Condena a la Dictadura.


«El objetivo es poner el tema encima de la mesa», reconoce el socialista Carlos Carnero, al preguntarle por las dificultades a las que se deberá enfrentar la iniciativa comunitaria.


Y es que se ha elegido el formato de pregunta oral al Consejo y a la Comisión para que estas instituciones se pronuncien sobre la dictadura franquista, y se espera, además, que se pueda debatir y votar una resolución de condena.


El calendario para todo ello sería la sesión plenaria del mes de julio, que se celebra unos días antes del 70º aniversario del golpe de Estado que inició la Guerra Civil. Sin embargo, antes de llegar al Hemiciclo, la iniciativa debe ser aprobada en la Conferencia de Presidentes que se celebra antes de cada Pleno, y que es la que decide el orden del día de la sesión, así como las preguntas orales que se admiten y si tienen o no debate.


«Una cosa es que haya 200 diputados de varios grupos pidiendo estas preguntas y otra muy diferente es que el presidente de su grupo vaya a defender esta iniciativa en la mesa de presidentes», asegura una fuente parlamentaria que no ve mucho futuro en esta petición.


Aunque se admitieran las preguntas, es bastante probable que no haya debate ni discusión, ya que el tema no se ha negociado entre presidentes ni en los grupos y parece que, de hecho, se trata de una iniciativa individual de cada parlamentario que la ha firmado.


Además, en la Eurocámara no hay precedentes de resoluciones similares tan concretas, aunque sí en el 50º aniversario del Holocausto judío, el pasado año, se aprobó una resolución muy general que condenaba el odio, el antisemitismo, el racismo y el totalitarismo.


Y, desde la entrada de los nuevos socios a la UE, también se han condenado los abusos estalinistas. «No me imagino a los franceses, a los italianos, o a los portugueses en esta Cámara aireando sus propios abusos y pidiendo condenas», comenta con ironía una fuente no política. «Eso es algo muy español».


Por su parte, los populares españoles aseguran no tener ni idea de esa iniciativa, a la que tachan de «resolución clandestina» y que, por lo tanto, se niegan a valorar. Desde las filas socialistas reconocen que no se ha invitado a participar a ningún diputado popular, pero aseguran que les van a pedir que se sumen.


La iniciativa tampoco se ve con buenos ojos desde el Consejo, tanto por las formas como por el fondo. Lo primero tiene que ver con la pregunta en sí misma: «¿Tiene previsto el Consejo seguir los pasos de la comunidad internacional y proponer la condena del régimen de Franco a nivel europeo y, asimismo, considerar la fecha del 18 de julio de 2006 como jornada oficial de condena del régimen franquista?».


Fuentes del Consejo explican que, si realmente se quiere pedir una condena de todas las instituciones, no debería haberse hecho mediante una pregunta oral, sino al más alto nivel con los presidentes de las tres instituciones y, quizá también con el presidente del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero.


Y, respecto al fondo, aseguran que no hay ningún precedente de condena por parte del Consejo a ningún régimen político ni anterior ni actual dentro de la UE, y que, en cualquier caso, primero «debería haber una condena explícita del franquismo en España».


En la Comisión tampoco ha habido precedentes de condena a regímenes concretos, sólo menciones generales en contra de los totalitarismos, del racismo y de la xenofobia. Por eso, fuentes comunitarias explican que, si las preguntas llegan al Pleno, las respuestas serán muy generales y abiertas, y los suficientemente ambiguas para no dejar satisfecho a nadie.


Pero para los promotores de esta iniciativa lo importante es que se hable del tema, incluso si no se consigue nada. «El objetivo es homenajear la memoria histórica de los que dieron su vida por la democracia y la libertad y hacer pedagogia histórica ante las nuevas generaciones», asegura Luis Yáñez.

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