A. V. PAMPLONA.

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El único centro de acogida de inmigrantes que existe hoy en Navarra, la Casa de África de Olite, cerrará sus puertas el próximo 30 de junio. Este local, gestionado por la ONG bilbaína Afrika Etxea, ha acogido desde 1999 a 413 inmigrantes sin papeles. El motivo del cierre es doble. Por un lado, la intención de los padres franciscanos de vender todos los terrenos que tienen en Olite, en los que se encuentra la casa cedida gratuitamente a la ONG. Por otra parte, la convicción de que no serán necesarios dos centros de acogida en Navarra, pues Cruz Roja plantea abrir en breve en Pamplona dos pisos para alojar a estas personas.

Ana García Matías, presidenta de la ONG Afrika Etxea, definió este centro de acogida como «pionero en toda España». «Mientras otros sólo atienden a los inmigrantes 15 días, ha habido alguno que ha permanecido con nosotros hasta dos años», dijo.

En estos seis años, la mayoría de inmigrantes que han pasado por el centro provenían de Europa del Este, si bien en los últimos meses han predominado los africanos, por los asaltos a las vallas de Ceuta y Melilla y la llegada de cayucos a Canarias. «A todos se les ha dado alojamiento, manutención, clases de lengua y se les ha ayudado a buscar empleo y tramitar documentos», aseguró Ana García. De los 413 inmigrantes atendidos, 350 han salido de la Casa de África con trabajo, papeles y alojamiento. Una quincena de ellos se han afincado en Olite.

«El local, de 2.400 m² de espacio entre edificio y jardines, tiene una capacidad de 40 personas, aunque nunca acogimos a más de 15 por temas de personal y financiación», explicó la presidenta de Afrika Etxea. En estos momentos, sólo quedan en la casa cuatro inmigrantes subsaharianos. «Estamos a la espera de reubicarlos, aunque es difícil», agregó.

«Hemos recibido en estos años alguna ayuda de Bienestar Social, pero generalmente hemos sobrevivido de un modo autofinanciado. Quiero dar las gracias a los padres franciscanos que confiaron en nuestro proyecto, sin olvidar a esas personas que, silenciosamente, nos han ayudado día a día», indicó Ana García. «Afrika Etxea continuará su andadura en un piso de Bilbao, pero nunca olvidaremos nuestra estancia en tierras navarras», sentenció la presidenta de esta ONG.