Hace casi un año, en agosto de 2005, se repitió un caso similar en la provincia de Cádiz, con la llegada de una embarcación con 140 inmigrantes clandestinos a bordo, en su mayoría de origen hindú y paquistaní. En aquella ocasión, los indocumentados fueron localizados también en un barco pesquero sin ninguna bandera o elemento identificativo, que navegaba a la deriva a escasa velocidad. El ‘Menavaal 1’ estaba tripulado por nueve personas de origen subsahariano y nacionalidad supuestamente senegalesa que declararon que la embarcación había partido de Mauritania.

El Gobierno español también dijo entonces que el buque no tenía como destino España, descartando que hubiera cambios en el tipo de inmigración que arriba a las costas andaluzas.

Los inmigrantes fueron repatriados y los tripulantes llevados a juicio.