El aeropuerto de San Javier recibió ayer un nuevo vuelo procedente de Canarias con 35 inmigrantes subsaharianos a bordo, que fueron recogidos por la ONG Cepaim y repartidos por diversas casas de acogida, tanto de la Región como de otras comunidades autónomas. Además, el lunes se recibieron otros cinco inmigrantes, de los que se hizo cargo Cruz Roja.

En ambos casos, el traslado se ha realizado en virtud de un convenio de colaboración entre el Ministerio de Trabajo y las ONG, que se encargan de la manutención de los inmigrantes y les ofrecen un techo y cursos de español durante al menos 15 días. Esta es una de las dos vías de entrada de inmigrantes subsaharianos a la Región desde Canarias. La otra se canaliza a través de la Comunidad Autónoma, que mantiene un convenio con el Ministerio de Trabajo y dispone de un fondo para acoger a estos inmigrantes. Sin embargo, la administración regional no recibirá esta semana ningún vuelo, ya que el albergue de Jesús Abandonado se encuentra de momento al completo, según explicó el director general de Inmigración, Basilio Gómez.

Los vuelos tienen como finalidad descongestionar los centros de acogida canarios, desbordados por la constante llegada de cayucos en las últimas semanas, procedentes de las costas de Senegal.