LA CAMPAÑA DEL REFERENDO // LOS NACIONALISTAS

Mas propone una ley que premie a los inmigrantes que se integren

El Periodico, 07-06-2006

Artur Mas hizo oídos sordos a la regañina de Pasqual Maragall y mantuvo su estrategia de lanzar promesas electorales aprovechando la campaña del referendo del Estatut. En El Vendrell, capital del Baix Penedès y con un 13% de población extranjera, un 70% de la cual procede del Norte de África, el presidente de CiU anunció que la federación impulsará una ley de acogida de inmigrantes que incluirá la firma de un “contrato con Catalunya”. El jefe de la oposición avanzó, sin dar más detalles, que los inmigrantes que asuman ese compromiso de integración, de carácter voluntario, obtendrán “beneficios y contrapartidas”.
“Los inmigrantes deben saber adónde vienen y quiénes somos”, sentenció el líder nacionalista, quien agregó que los recién llegados deben saber que aparte de unos derechos, que son automáticos, también tienen deberes hacia la comunidad que les acoge. De ahí que defendiera la necesidad de impulsar, tras la aprobación del Estatut – – que por primera vez concede competencias a la Generalitat en materia de inmigración – – , ese “contrato con Catalunya”.

EL ESPEJO DE QUEBEC
¿En qué consistirá ese contrato? Pues con el consabido argumento de que ahora hay que explicar el Estatut y que ya llegará la campaña de las autonómicas para dar detalles, Mas no soltó prenda. Se limitó a decir que la “voluntad manifiesta de arraigo” en Catalunya, asumiendo los “valores propios” de la sociedad catalana y “su estructura identitaria” comportará “beneficios y contrapartidas” en la integración del inmigrante.
Sin embargo, una mirada a Quebec puede aportar algunas pistas. En febrero del 2003, medio año antes de las últimas autonómicas y durante un viaje oficial que hizo a esa región canadiense, Mas se empapó del modelo quebequés y anunció su intención de exportarlo a Catalunya.
Quebec, en virtud del pacto suscrito con el Gobierno de Canadá, contacta a los inmigrantes en los países de origen y les concede el certificado de selección en función de unos requisitos profesionales, lin –
güísticos (saber o querer aprender francés), profesionales y voluntad de integración. Este sello es indispensable para que el Gobierno de Canadá les dé el permiso de trabajo o residencial. Con el nuevo Estatut, la Generalitat será la administración que conceda el permiso de trabajo, pero no el de residencia.

INSPECTORES ESPECIALES
Mas anunció que, si gana, impulsará en los países de origen “una red potente de oficinas de selección de trabajadores”, experiencia que CiU ya intentó cuando aún estaba en el poder, y creará, gracias a las nuevas competencias del Estatut en inspección laboral, un cuerpo especializado para “luchar sin cuartel” contra la contratación ilegal de inmigrantes.

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