El presidente del Gobierno anunció en el debate sobre el estado de la nación el acuerdo alcanzado con Senegal para repatriar a 623 irregulares de ese país africano que habían llegado a Canarias. José Luis Rodríguez Zapatero precisó que esta cifra es la de las personas identificadas, pero que todavía quedaba un grupo sin identificar con lo que el contingente de repatriados podría ser de casi 700 e incluso llegar a las 800 personas.


El jefe del Ejecutivo aprovechó su debate con el portavoz de Coalición Canaria, Paulino Rivero, para hacer el anuncio. Las repatriaciones desde las islas comenzaron este miércoles y se prolongarán hasta el 6 de junio. Rodríguez Zapatero explicó que su Gobierno trata de llegar a acuerdos similares con Guinea – Bissau y Argelia.


El acuerdo con Senegal es el primer fruto de la ofensiva diplomática emprendida por el Ministerio de Asuntos Exteriores en el África subsahariana y que ha llevado al secretario de Estado, Bernardino León, a visitar la zona en dos ocasiones y entrevistarse con sus gobernantes para buscar fórmulas que impidan, por un lado, el éxodo de inmigrantes, y, por otro, agilizar las repatriaciones de los sin papeles que lleguen a suelo español.


Pero Coalición Canaria reprochó al Gobierno de Zapatero haber llegado “tarde” al problema de la inmigración. Rivero advirtió al jefe del Ejecutivo de que en su comunidad autónoma –a la que desde 2001 llegan al año 19.500 inmigrantes en situación irregular– , “se extiende la sensación de que ha habido cierta dejadez y cierta improvisación” a la hora de abordar este fenómeno. Rivero admitió que se han realizado esfuerzos, pero pidió que se busque el compromiso de Europa ante un asunto que requiere, dijo, “respuestas globales”.


Zapatero, molesto

Su tono recriminatorio no gustó nada a Zapatero, que ayer dedicó buena parte de su discurso a enumerar los logros del Gobierno en la lucha contra los traficantes de personas, las políticas para la integración de los extranjeros y las medidas para reforzar las fronteras.


Rivero valoró la aprobación del Plan Integral de Seguridad para Canarias. Sin embargo, recriminó al Gobierno las reticencias mostradas por el hoy ministro de Defensa, José Antonio Alonso, al proyecto. Además, avisó de que el trabajo interministerial desempeñado por la número dos del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, se queda corto. “Siempre recurre usted al cajón de sastre de la vicepresidenta, pero son muchas cosas las que hay que coordinar ¿No ha pensado adecuar la estructura adminitrativa del Gobierno a una nueva realidad y crear un ministerio de Inmigración como Alemania, Suecia, Dinamarca o Canadá?” planteó.


Visiblemente enfadado, el presidente del Gobierno reprochó al diputado sus críticas (“permítame que no admita que hable de improvisación ni mucho menos de dejadez”) y le aseguró que la vicepresidenta “representa más que un ministerio”. Así, alabó su “eficacia” a la hora de coordinar a los ministerios de Interior, Defensa y Exteriores.