Inmigración femenina

Diario Sur, 21-02-2006

La inmigración empieza a tener un claro rostro femenino y el hecho se manifiesta de forma evidente precisamente en Málaga. Si hace años era el cabeza de familia el que abandonaba el país de origen para intentar buscar una oportunidad aquí, ahora son cada vez más numerosas las mujeres que dejan hijos atrás y se embarcan en una duran aventura que afrontan en solitario, con el desconocimiento del idioma como uno de los grandes obstáculos. La situación merece una atención especial, porque muchos casos pueden arrastrar una triple discriminación: la de ser mujer, extranjera y sin recursos, y con ello se convierten en caldo de cultivo para la explotación y la situaciones de riesgo. Hay un dato ya alarmante: una de cada tres denuncias por maltrato registradas el pasado año tuvo como víctima a una inmigrante.