Los trabajadores catalanes perdieron el año pasado un 2,2% de poder adquisitivo o de capacidad de compra, según un informe de IESE y Adecco. El estudio constata que en el 2005 el salario medio bruto de los catalanes era inferior en términos reales al del 2004. La razón es que el incremento salarial fue inferior al del coste de la vida, medido en términos de índice de precios al consumo (IPC).
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Así, en el 2005, el salario medio en términos reales (descontando el porcentaje de subida del IPC) era de 1.669 euros. Esa cantidad es inferior al salario real del 2004, que estaba situado en 1.706 euros una vez descontada la inflación. Este descenso es el primero que se da en los últimos cinco años y deja en cero la mejora del poder adquisitivo o capacidad de compra de los últimos años. Así, en el 2005 la capidad de compra de los trabajadores de Catalunya era la misma que en el 2000.
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Diego Barceló, uno de los responsables del estudio, afirma que el descenso de los salarios en términos reales se debe a “la caída de la productividad, la alta inflación en Catalunya y el efecto de la inmigración”.
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En el caso de la productividad, el descenso provoca que las empresas ajusten los salarios. La alta inflación – 4,3% en el 2005- duplicó la previsión hecha por el Gobierno, lo que provocó que los trabajadores con convenios colectivo sin cláusula de revisión perdieran poder adquisitivo.
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El último efecto que genera caída de los salarios – según Barceló- es el de la gran entrada de inmigrantes. Barceleó precisó que el año pasado había má de 69.000 inmigrantes en el paro. “Son gente que no cobra el paro y que tiene una necesidad más acuciante de trabajar, puesto que no disponen de una red de apoyo como la familia”, dice Barceló, quien añade que esto les empuja a trabajar en ocasiones por bajos salarios. Además, UGT y CC. OO. avisan de que el bajo nivel de sindicación de los inmigrantes genera que acepten subidas salariales en convenio por debajo de las que consiguen los empleados autóctonos.
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Catalunya es la comunidad en la que la caída de los salarios en términos reales fue más pronunciada. Además, duplicó el descenso del conjunto de España, que fue del 0,9%. El informe también prevé que el descenso de los salarios en términos reales (o pérdida de poder adquisitivo) continúe en los próximos dos trimestres, tanto en España como en Catalunya.
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Por otra parte, otro estudio destaca que las empresas catalanas no fomentan la flexibilidad laboral. Un informe de Esade y la Cambra de Comerç de Sabadell señala que las compañías adoptan un tono “unilateral” y “poco creativo” en las negociaciones. El estudio, elaborado a partir del análisis de siete convenios colectivos del 2004 y el 2005, precisa que los modelos de negociación son “estáticos”, por lo que la empresa se reserva todas las competencias de ajuste de la fuerza de trabajo. Además, las medidas de flexibilidad reflejadas en los convenios se centran en materias como la contratación, la reestructuración y los despidos, y en muchos casos las empresas “se limitan a establecer lo mismo que ya prevé la ley”.
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