Madrid
La inmigración tendrá un protagonismo especial en el debate sobre el estado de la Nación que mañana se inicia en el Congreso, vinculado de forma directa con la llegada masiva de irregulares a Canarias. El presidente Zapatero lo abordará en su discurso de apertura y el PP promete una actitud muy crítica.

En la comunicación que el Gobierno ha remitido a la Cámara con las líneas básicas de los asuntos que va a llevar al debate, hay ya una referencia al fenómeno migratorio. Se trata de una clara apuesta por la cooperación política y económica con los países emisores, como «únicas armas para resolver problemas como el de la inmigración ilegal, cuyo evidente origen son las abismales disparidades de renta en el mundo».

Si en anteriores debates sobre el estado de la Nación el problema de la inmigración clandestina ha sido abordado de forma tangencial frente a las prioridades marcadas por los dos principales partidos – y sólo a requerimiento del grupo canario – , en esta edición se va a convertir en uno de los temas estrella al hilo de los acontecimientos, por detrás del proceso de paz y del diseño de la estructura del Estado.

De hecho, el Partido Popular, que ya acribilló al Ejecutivo con una batería de preguntas sobre inmigración la semana pasada en los plenos del Congreso y Senado, ha dejado clara su intención de llevar el asunto a primera línea de la batalla política.

La estrategia popular ira encaminada a intentar dejar en evidencia la «incapacidad» del Gobierno de Zapatero para hacer frente con eficacia a la llegada de cayucos a las Islas desde la costa africana. Además, Mariano Rajoy incidirá en la tesis de que la situación actual es consecuencia directa del proceso de regularización que el Ejecutivo puso en marcha el año pasado, como origen de un eventual efecto llamada.

No está claro si el presidente del PP también va a insistir en la polémica vinculación directa entre inmigración y delincuencia que el número dos del partido, Ángel Acebes, retomó el último miércoles ante el pleno del Congreso, cuando relacionó la llegada de irregulares con la ola de asaltos a viviendas unifamiliares en urbanizaciones de Madrid y Barcelona.

En todo caso, el enfoque del problema irá más allá de la llegada de cayucos a las Islas desde Mauritania y Senegal – la cara más trágica y mediática de la inmigración – , para abordar también las consecuencias de la entrada de ciudadanos del Este por los Pirineos o de latinoamericanos con visado de turista a través de los aeropuertos.

Por su parte, Coalición Canaria hará de la inmigración irregular el eje de su intervención. Paulino Rivero pedirá más agilidad al Gobierno a la hora de cumplir sus compromisos desde «una actitud de colaboración, pero con absoluta firmeza». El portavoz nacionalista tiene previsto plantear la necesidad de mejorar la vigilancia de fronteras, garantizar la seguridad de la Comunidad Autónoma y la reactivación del grupo de trabajo sobre el control de población, acordado en el debate del año pasado.

El debate continuará el miércoles y el próximo 6 de junio, fecha fijada para la votación de las propuestas de resolución.
Silencio sobre ETA

El Gobierno de Zapatero ha dejado clara su intención de no introducir en el debate a ETA, en la medida en que su comunicación no incluye ninguna referencia al alto el fuego permanente. La intención del Ejecutivo es dejar este asunto para el debate monográfico de junio, aunque nada podrá evitar que los portavoces de los grupos aborden el proceso de paz durante sus intervenciones y fuercen la respuesta del presidente.
Zapatero da aliento a las reformas estatutarias
(Foto: canarias7)AMPLIAR

Jose Luis Rodríguez Zapatero.

En relación con las reformas estatutarias pendientes, entre las que se encuentra la de Canarias, Zapatero defiende «un nuevo acomodo de las demandas de mayor autogobierno y responsabilidad competencial» para aquellas autonomías que lo demanden.

El Ejecutivo mantiene que el procedimiento establecido para estas reformas está funcionando bien, «más allá de cualquier disonancia», porque se están cumpliendo las tres condiciones previas.