El líder del PP en las islas, Biel Company, arremetió ayer con dureza contra la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, a la que responsabilizó de la oleada de pateras llegadas a Ibiza y Formentera en los meses de agosto y septiembre.

«Me preocupa que ahora las pateras se estén desviando a Baleares, y es posible que sea porque alguien ha hecho demagogia. Igual la señora Armengol ha hecho demagogia con el tema y no se puede hacer», censuró ayer Company en Ibiza, tras participar en la Escuela de Verano de Nuevas Generaciones.

El pasado agosto la presidenta balear se mostró «encantada» de ofrecer al Gobierno central los puertos de Mahón y Palma para un posible atraque del Open Arms, que en ese momento se encontraba en aguas de Italia con más de un centenar de inmigrantes a bordo.

«Desde el primer momento en el Govern hemos puesto a disposición los puertos de Baleares para acoger a los refugiados que están en el Open Arms», anunció Armengol.

Un mensaje que sirvió ayer a Company, ya en plena precampaña de las generales, para decir que hay que ser solidarios con la gente que lo pasa mal, aunque sin demagogia «porque después se produce un efecto llamada y las mafias se aprovechan de ello».

También apostó por algo que «se dice mucho y se hace poco», que es «trabajar en el origen para que la gente no deba huir de sus casas», apuntó.

Las declaraciones de Company van en la misma línea que las de la semana pasada de la senadora María Salom, quien denunció que existe una «política de postureo» por parte del Gobierno, «que va desde las fotos en los puertos a la llegada de las embarcaciones humanitarias, hasta el ofrecimiento de los puertos de Baleares para el rescate de embarcaciones alejadas de nuestras costas, mientras la llegada de pateras a las costas Baleares se incrementa sin que el Gobierno atienda sus obligaciones».

Los parlamentarios baleares en Madrid ya ha preguntado oficialmente al Gobierno si existe o no una ruta de acceso por Baleares que está siendo utilizada por las mafias de trata de personas del Mediterráneo.

«No se puede despachar el incremento significativo de llegada de embarcaciones a las costas de Baleares señalando simplemente que la vía de entrada por Baleares es una vía fracasada y sin explicar qué medios pone el Gobierno de Sánchez para evitar que Baleares se convierta en vía de entrada», denunció el senador popular, Marí Bosó.

Las críticas del PP van en la línea de las del grupo de Vox en el Parlament balear, quien pidió en agosto la convocatoria de la Diputación Permanente para exigir la «comparecencia urgente» de la presidenta, con el objetivo de que explicara el ofrecimiento al Open Arms, cuando «este no es el momento».

Además de las pateras, Company tuvo tiempo de hablar del adelanto electoral, y de arremeter contra Pedro Sánchez.

Para el líder del PP balear, el presidente ha querido convocar elecciones «desde un primer momento», porque «no tiene un proyecto para España, sino para él mismo».

Sin embargo, también lanzó una advertencia a los ciudadanos, en la misma línea que curiosamente usó Sánchez para pedir que esta vez votaran «más claro», al asegurar que «la culpa ahora será de la gente si vuelve a votar lo mismo».

Para Company, como político, siente que «a veces» no están a la altura, pero también que los políticos están «a la altura de las votaciones, y los que votan son los ciudadanos».

Por eso dice que el 10 de noviembre los españoles tienen la oportunidad de «echárselo en cara» a Pedro Sánchez, mandarlo «a su casa» y cambiar la manera de hacer política.

«Todos tenemos la oportunidad de traer a los políticos que nos saquen de este lío y no de votar a los que nos han metido en este lío», concluyó.