Representantes de los Gobiernos de Ceuta, Melilla y Canarias se reunieron el jueves en Madrid con la Dirección General de Inmigración para abordar, entre otras cuestiones, la repatriación de menores no acompañados que sean mayores de 16 años.

La petición fue trasladada por el director general del área de Menores del Gobierno ceutí, Miguel Fábrega, debido a una mayor presencia de menores en la ciudad procedentes del país vecino. Fábrega apunta que el Gobierno estudiará la reactivación de la circular derogada en 2004 con la entrada en el Gobierno del PSOE y que permitía devolver a su país a los menores con más de 16 años. Y es que la Ciudad Autónoma registró una disminución de inmigrantes cuando entró en vigor esa circular, de ahí la petición.

Fue la Fiscalía General del Estado la que remitió en su momento dicha circular en la que solicitaba a los fiscales que pidieran la repatriación de los extranjeros mayores de 16 años que viven independientes de sus padres y con el consentimientos de éstos por entender que tenían capacidad para regir su persona y bienes como si fueran mayores de edad.

El director general del área de Menores considera que «es necesario tomar medidas a corto plazo con estos niños, porque las medidas generalistas están bien pero hasta encontrar una válida hay que poner soluciones concretas».

El Estado por su parte, señala que ha descendido el número de menores no acompañados en España en el periodo 2004 – 2005 en un 35 por ciento, pero el Gobierno ceutí considera que «ese dato no corresponde a nuestro ámbito». Sí recuerda Fábrega que durante el periodo de aplicación de la circular se registró un importante descenso en el número de menores no acompañados en la ciudad, pero en 2004 la cifra volvió a incrementarse.

Los centros, en el aire

El director del área de Menores regresó de la reunión celebrada en Madrid con la sensación de que la construcción de los centros de acogida de menores en Marruecos sigue en el aire.

Según ha comentado a este medio, desde que se anunció en noviembre la construcción de los dos centros ubicados en Nador y Beni Mellalla no se ha avanzado «prácticamente nada».