Inmigración, ayudas y blindaje
Diario de Navarra, 24-05-2006La vicepresidenta Fernández de la Vega recabó ayuda de la UE en Bruselas ante la inmigración ilegal, grave y creciente. Es un problema europeo, no sólo nacional, que no se solucionará con cerrar las fronteras.
LA llegada masiva de inmigrantes sin papeles, como la registrada estas semanas en Canarias, no afecta sólo a las islas ni a España, sino al conjunto de la UE. Ocurre, sin embargo, que para este fenómeno no existe todavía una política común de los Veinticinco y las experiencias de cada cual pueden no ser enteramente válidas para los demás. Pero hay algo claro. La regularización de ilegales aprobada el año pasado en el Congreso contenía una segunda parte, que era el control estricto en la llegada de más extranjeros. Eso no se ha cumplido, y se ha llegado a publicar que, un año después de la ley impulsada por el ministro Caldera, vuelve a haber entre nosotros otro millón y pico de inmigrantes ilegales. Negar el «efecto llamada» puede ser tan fácil como inútil. Y, además, según resumió el comisario de Política de Ayuda Humanitaria, Louis Michel, «cuando se va por libre en la inmigración, suele haber resultados negativos, como ha pasado en España». Las «puertas abiertas» y el «papeles para todos», que los socialistas defendían tanto, dan este resultado.La Agencia de Control de Fronteras de la UE pondrá en marcha un sistema de patrulla naval y aéreo, al hilo de la petición de Canarias, después de que el Gobierno desechara la presencia de la Armada. Su eficacia es dudosa. Ni se pueden poner «puertas al campo» ni se pueden repeler a cañonazos a quienes se lanzan a recorrer en barca más de mil kilómetros. Los inmigrantes, aun ilegales, son personas y tienen derechos. Aquí y ahora, lo que hay que analizar es si el tan cacareado “Plan África” puede dar algún resultado práctico, aun a larguísimo plazo. Negociar y convencer a países con quienes ni se tenían relaciones diplomáticas, parece misión imposible o maniobra voluntariosa, pero no un plan. Y entregar dinero a cambio de que vigilen las costas, puede ser sólo soborno de dirigentes.
(Puede haber caducado)